La combinación de los mensajes vía Twitter enviados por el presidente Nicolás Maduro y la vicepresidenta Delcy Rodríguez permiten “calibrar” el grado y tipo de nivel que alcanzarán las relaciones bilaterales Venezuela-China: los convenios de cooperación y amistad se elevarán “a su máxima expresión”. El término “máxima expresión” lo utilizó el propio presidente Maduro al partir a China para reunirse con su homólogo Xi Jinping. Una serie de viajes, reuniones y encuentros realizados a lo largo de este año han ido preparando el encuentro de alto nivel entre ambos mandatarios. Incluso, la vicepresidenta Delcy Rodríguez voló antes, y el lunes pasado sostuvo una reunión con el presidente de la Comisión Mixta de Alto Nivel de China, He Lifeng.
En un primer tuit, Nicolás Maduro anunció: “Tendremos una visita de Estado muy oportuna en la República Popular China, vamos a profundizar nuestra relación bilateral en todos los campos necesarios para el crecimiento y la prosperidad de nuestro pueblo”. En un segundo trino completó el propósito: “Venezuela y China elevarán, a su máxima expresión, las relaciones bilaterales. Avanzaremos en nuevos acuerdos de asociación estratégica en el campo económico, comercial, energético, financiero, tecnológico, comunicacional, político y cultural. Ya en el aire mandó otro mensaje: “Rumbo a la República Popular China para seguir fortaleciendo el camino a la cooperación e inversión productiva, en el marco del Programa de Recuperación Económica, Crecimiento y Prosperidad”.
En Maiquetía, poco antes de abordar el avión, Nicolás Maduro tipificó su visita de trabajo con su homólogo como “necesaria, oportuna y llena de grandes expectativas, muy positivas para Venezuela”.
Delcy Rodríguez, en China, expuso los motivos de su viaje al llamado “gigante asiático: “En nuestra visita a la República Popular China sostuve extraordinaria reunión de trabajo con el presidente de la Comisión Mixta de Alto Nivel de la parte China, ministro He Lifeng, para consolidar y expandir la cooperación entre nuestros países”. Luego tuiteó: “China y Venezuela podrán impulsar al máximo sus áreas de cooperación para el beneficio de nuestros pueblos. Juntos construimos un mundo de equilibrio, pluripolar y multicéntrico».
El tuit de Nicolás Maduro en el que menciona “nuevos acuerdos de asociación estratégica”, han levantado una creciente expectativa en cuanto a posibles novedades, ya que los programas de cooperación abarcan un amplio espectro desde que el presidente Hugo Chávez decidió potenciar las simples, formales y protocolares relaciones, durante su primera viaje a la República Popular China, el 11 de octubre de 1999. Chávez en aquella oportunidad vaticinó el futuro luminoso de lo que serían las nuevas relaciones con China y los beneficios que traerían para Venezuela.
En junio de 2015, con motivo de conmemorarse el 41er aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre China y Venezuela, el embajador en Beijing, Iván Zerpa, resaltó que ambos países mantenían un vigoroso intercambio bilateral gracias al cual se ha establecido una alianza estratégica integral.
El diplomático expresó que el fortalecimiento de las relaciones chino-venezolanas tuvo como gran impulsor al comandante Hugo Rafael Chávez Frías, ya que a pesar de haberse establecido formalmente los vínculos diplomáticos bilaterales en 1974, fue a partir del ascenso al poder de la Revolución Bolivariana cuando se inició un avance decido hacia la unidad real entre ambas naciones.
Zerpa recordó que en aquel primer viaje de Chávez a China este hizo un recorrido por la Gran Muralla.
«Hemos venido a la Gran Muralla y hemos sentido la mística fuerza de cien siglos y de mil pueblos, debajo de la presencia de Dios. Nos llevamos todo eso recogido como una flor en el corazón. ¡Rumbo a la unidad real entre China y Venezuela!», dijo el Comandante.
La actual visita del presidente Maduro a China se realiza en momentos en que recrudece el ataque mediático contra Venezuela, y la imposición de un clima de inminente guerra, a la par de conjuras diplomáticas del imperio estadounidense tanto en la OEA como en la ONU.
Citas previas
Delcy Rodríguez, en la agenda de encuentro en China, se reunió el pasado miércoles con su homólogo, Wang Qishan, como parte de su agenda de trabajo.
“China y Venezuela seguirán juntos en la construcción de un mundo pluripolar, sin hegemonías imperiales y a favor de la paz mundial. El presidente Nicolás Maduro consolida el camino de Chávez”, resaltó Rodríguez.
La vicepresidenta, en otra reunión que ilustra los propósitos venezolanos, conversó con el presidente Ejecutivo del Banco de Desarrollo de China (BDC), Zheng Jizhe, dándole cumplimiento a la diplomacia bolivariana de paz, según reportó una nota de la Vicepresidencia de la República. Durante la jornada también participaron Iván Zerpa, embajador de Venezuela en China, el ministro de Petróleo y presidente de Pdvsa, Manuel Quevedo, el ministro de Economía y Finanzas, Simón Zerpa, la ministra de Comercio Exterior e Inversión Internacional, Yomana Koteich, así como Hugbel Roa, titular de Educación Universitaria, Ciencia y Tecnología, y Joselit Ramírez, superintendente de Criptoactivos y Actividades Conexas.
En agosto de este año, un importante funcionario de la Cancillería venezolana, Rubén Darío Molina, viceministro para Asia, Medio Oriente y Oceanía, estuvo por China. Allá participó en un encuentro diplomático con el ministro asistente de Relaciones Exteriores, Qin Gang, con el fin de fortalecer, actualizar y celebrar la Subcomisión de Relaciones Bilaterales de la Comisión Mixta de Alto Nivel China-Venezuela, reseñó una nota de prensa de la Cancillería venezolana.
El alto funcionario chino hizo una valoración de la relación bilateral y consideró que “efectivamente, durante los últimos años las relaciones se han desarrollado de forma rápida y feliz, gracias a la conducción estratégica de ambos mandatarios”, expresó Qin Gang, al tiempo que señaló que “China y Venezuela somos buenos amigos de confianza mutua y ganancia compartida recíproca”.
Qin Gang resaltó la voluntad política de ambos países y apuntó que “estamos dispuestos a fortalecer la cooperación con Venezuela y con la región para fortalecer la Asociación de Cooperación Integral China-América Latina y el Caribe”.
El viceministro Rubén Darío Molina aseguró que la diplomacia bolivariana de paz, liderada por el presidente Nicolás Maduro, ha mostrado su interés en participar en la iniciativa de la Franja y la Ruta, tópicos esenciales para diversificar la economía en la región y fortalecer el multilateralismo.
Asimismo, Molina presentó el Programa de Recuperación, Crecimiento y Prosperidad Económica, y agradeció la condena de la República China al magnicidio frustrado del pasado 4 de agosto.
En el ámbito de la consolidación de las relaciones chino-venezolanas, la cuestión energética y petrolera ocupa un lugar de suma importancia en momentos en que el presidente ha ordenado a Pdvsa elevar sustancialmente la producción. La cuestión energética figura entre las áreas que abordarán el presidente Maduro y Xi Jinping.
En julio pasado la Corporación Nacional de Petróleo de China (CNPC) y Petróleos de Venezuela (Pdvsa) acordaron acelerar esfuerzos para el fortalecimiento y aumento de la producción del crudo en sus empresas mixtas.
La información se dio a conocer durante el encuentro que sostuvieron el presidente de la CNPC, Wang Yilin, el ministro del Poder Popular de Economía y Finanzas, Simón Zerpa Delgado, y el vicepresidente de Comercio y Suministro de Pdvsa, Fernando del Quintal, en el que se hizo una revisión de los proyectos de cooperación entre ambas empresas para fortalecerlos.
El objetivo central de todas las cooperaciones con la CNPC es aumentar la producción de petróleo aprovechando las potencialidades de la asociación estratégica integral de China en Venezuela.
Mano extendida
De acuerdo a conclusiones de Telesur acerca de las relaciones con China, Venezuela se ha visto enormemente beneficiada con la cooperación y la mano extendida de la potencia asiática, la cual a su vez ha conseguido en Venezuela una fuente segura para suplir sus necesidades energéticas.
Señala la agencia noticiosa que la Comisión Mixta de Alto Nivel, acordada en 2001, supuso un impulso a la relación que ambos países mantenían desde 1974. Con dicho mecanismo se aprobaron múltiples programas que abordaron varias áreas estratégicas.
Más de 62 mil millones de dólares se han inyectado en Venezuela por medio de la Comisión Mixta de Alto Nivel, informó el presidente venezolano Nicolás Maduro en 2017, cuando lideró la clausura de la XV reunión de este mecanismo de cooperación.
El Fondo Mixto Chino-Venezolano, creado en 2007, ha permitido financiar más de 200 proyectos venezolanos de desarrollo, entre ellas las líneas del Metro de Valencia y Maracaibo, vías férreas y terrestres, lo que le ha permitido al Ejecutivo ampliar el sistema de transporte masivo.
Se trata de 20 mil millones de dólares que han entrado a las finanzas de Caracas. El objetivo: “Seguir expandiendo los mecanismos de financiamiento que han demostrado su viabilidad y (ser) profundamente exitosos como mecanismos económicos, técnicos y políticos de financiamiento”, dijo en la fecha citada el presidente Maduro.
La empresa de capital mixto Venezolana de Industria Tecnológica (VIT), que ensambla y distribuye computadoras con mano de obra venezolana, nació como resultado de una carta de intención (2004) entre ministerios venezolanos y la empresa china Lanchao Group Co. Ltd.
VIT ha ensamblado más de 1.300.000 computadoras de escritorio, portátiles, tabletas y servidores, y continúa sus operaciones en pro de la innovación como empresa líder del proyecto de soberanía tecnológica de la nación caribeña.
En 2005, el Ministerio para Hábitat y Vivienda y la empresa Citi Group firmaron un acuerdo para la cooperación en materia de construcción de viviendas, las cuales estaban contempladas para varios estados de Venezuela.
El factor tecnológico ha sido determinante en el vínculo entre Pekín y Caracas. Junto a VIT también destacan los satélites Bolívar, Miranda y Sucre, lanzados a la órbita con ayudas de diversa índole de China.
En 2008 Venezuela puso en órbita al satélite Bolívar, en 2012 el Miranda y en octubre de 2017 se lanzó el Sucre, lo que coloca al país suramericano a la vanguardia en materia aeroespacial entre sus vecinos, señaló Telesur.
La creación de esta Comisión de Alto Nivel entre Venezuela y China se remonta al año 2001 y desde entonces ha generado 480 acuerdos en provecho de ambas naciones.
Entre estos acuerdos se destaca la instalación de la planta de ensamblaje de autobuses Yutong en el estado Yaracuy, que tanta utilidad ha prestado para paliar la crisis de transporte que padece Venezuela derivaba de la guerra económica.
La Franja y la Ruta
Mientras el llamado “Gran hegemón del norte” anda de guapetón por el mundo con un garrote amenazando pueblos y naciones que no se sometan a sus designios, China apuesta en contraparte a un mundo multipolar, de cooperación y solidaridad.
Desde hace tres años funciona el Foro China-Celac, el cual se ha convertido en la principal vía para la cooperación conjunta entre ambas partes.
En la reunión celebrada en Santiago de Chile, la iniciativa de la Franja y la Ruta fue bien acogida entre los participantes, quienes opinaron que la construcción conjunta de de este proyecto traerá nuevas ideas y energía a la Asociación de Cooperación Integral China-ALC y abrirá nuevos horizontes. Como señaló el canciller chino, Wang Mi, esta es la «llave dorada» para un mejor porvenir de ambas partes.
La iniciativa china de la Franja y la Ruta, que se extiende a América Latina, propone conectar más de sesenta países de Asia, Europa y África para mejorar las infraestructuras para una comercio estimulante.
En Santiago la parte china ofreció cinco propuestas: construir una «gran conectividad» que cubra el mar y la tierra, cultivar «grandes mercados» que sean abiertos y recíprocos, crear «grandes industrias» caracterizadas por tecnologías avanzadas e independientes, aprovechar «grandes oportunidades» del desarrollo impulsado por la innovación y lanzar una «gran comunicación» basada en la igualdad y la confianza mutua.
El ministro chino de Relaciones Exteriores, Wang Yi, consideró la cooperación China-ALC como un árbol frutal que crecerá más frondoso y dará más frutos si tiene el cuidado del agua del manantial de la Franja y la Ruta.
Venezuela le hizo saber a China su interés en sumarse a este novedoso programa.