Un rinoceronte blanco en peligro de extinción murió esta semana en las instalaciones del zoológico de Dvur Kralove (centro de la República Checa).
Nabire, como era llamada cariñosamente por los cuidadores del zoológico, falleció luego padecer una serie de rupturas en un quiste. “Sin su proporción líquida, el quiste patológico pesaba 40 kg. No ha habido ninguna posibilidad de curarla”, sostuvo el zoólogo Jiri Hruby.
Por su parte, el director del zoológico, Premysl Rabas, lamentó a través de un comunicado la pérdida de uno de los rinocerontes que se encuentra en peligro de extinción en el mundo.
“Es una pérdida difícil de describir”, resumió Rabas en la comunicación al tiempo que informó que con el descenso de Nabire sólo quedarán cuatro ejemplares de esta subespecie en vías de extinción.
“La muerte de Nabire simboliza una disminución catastrófica del número de rinocerontes debida a una delirante codicia humana. Una vez más esto ha hecho acercarse a una especie animal a su total extinción”, lamentó Rabas.