Citan a presidente de Facebook por presunto uso ilícito de información de usuarios

Los parlamentos británico y europeo convocaron esta semana al presidente de Facebook, Mark Zuckerberg, para abordar el “uso ilícito de información personal de usuarios de la red social” que presuntamente hizo la empresa Cambridge Analytica, con el fin de manipular campañas electorales, particularmente la que precedió al triunfo del presidente estadunidense, Donald Trump, en 2016, difundió La Jornada, de México.

El diario señaló en una nota que la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos comenzó una investigación sobre el acceso sin autorización a los datos de más de 50 millones de usuarios de Facebook, en momentos en que Cambridge Analytica suspendió a su presidente ejecutivo, Alexander Nix, después que se difundieron grabaciones transmitidas por el Canal 4 británico en las que el directivo se ufana del papel que la compañía desempeñó en el triunfo de Trump.

La red social dijo estar escandalizada tras haber sido engañada por el uso indebido de datos de sus usuarios por parte de Cambridge Analytica y aseguró entender la gravedad del problema.

En un comunicado, la empresa creada por Zuckerberg expresó su determinación de aplicar enérgicamente sus políticas para proteger la información privada y adoptar las medidas necesarias para garantizar que esto ocurra.

Una portavoz de Facebook, red social en la que una tercera parte de la población mundial tiene cuentas, afirmó que los dirigentes del grupo trabajan sin descanso para investigar todos los hechos y aplicar las medidas necesarias, porque comprenden la importancia del problema.

Un comité del Parlamento británico pidió a Zuckerberg que comparezca ante ellos para responder preguntas. El presidente del comité sobre medios, Damian Collins, afirmó: “Es hora de escuchar a un alto ejecutivo de Facebook que tenga la suficiente autoridad para dar una declaración detallada de la catastrófica falla en su proceso. Dado que a principios de año se comprometió a ‘arreglar’ Facebook, espero que este representante sea usted”, dijo en referencia a Zuckerberg.

Cambridge Analytica aseguró que está comprometida en ayudar a la investigación británica. Sin embargo, fuentes cercanas a las pesquisas dijeron que la firma no cumplió con la fecha límite para entregar la información que se le solicitó.

Antonio Tajani, presidente del Parlamento Europeo, invitó a Zuckerberg a que explique el escándalo sobre el uso ilícito de información personal de millones de usuarios. Facebook necesita aclarar ante los representantes de 500 millones de europeos el hecho de que los datos personales no fueron usados para manipular la democracia, sostuvo Tajani.

Además, la Organización de las Naciones Unidas también pidió explicaciones a Facebook y se ofreció como parte auspiciadora del debate en torno al uso de datos personales y cómo ocurrió el incidente, por tratarse de algo que nos preocupa a todos, dijo el secretario general del organismo, Antonio Guterres.

Los fiscales de Nueva York y Massachusetts abrieron una investigación sobre el escándalo que afecta a Facebook, al tiempo que la autoridad reguladora del comercio estadunidense, la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos, inició una investigación sobre cómo Facebook usó los datos personales de los usuarios. La comisión podría imponer a la empresa una multa de 40 mil dólares por día de violación a las normas de privacidad, informó The Washington Post.

Según investigaciones de los diarios The New York Times, de Estados Unidos, y de The Observer, la edición dominical del rotativo británico The Guardian, la empresa Cambridge Analytica recopiló con su conocimiento los datos personales publicados en Facebook por 50 millones de usuarios con fines comerciales y políticos.

Los datos fueron usados para elaborar un programa informático con la meta de predecir e influenciar el voto de los electores, sobre todo durante las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016.

Los diarios coincidieron en acusar a Cambridge Analytica de apropiarse y utilizar datos de decenas de millones de usuarios de Facebook, sin su consentimiento, con los que habría creado un algoritmo para prever e influir individualmente en el voto de los electores estadounidenses en los comicios presidenciales de 2016.

EDITORIAL: “LA MÁQUINA DE ESPIAR”

De acuerdo con el editorial de La Jornada, titulada “Facebook, la máquina de espiar”, el fundador y presidente de Facebook, Mark Zuckerberg, enfrenta convocatorias a comparecer en los parlamentos europeo y británico para explicar el uso ilícito de la información personal de millones de usuarios de esa plataforma por parte de la consultora política Cambridge Analytica, una firma que se atribuye el triunfo electoral del hoy presidente estadunidense, Donald Trump, y que ha interferido en centenares de procesos electorales en distintos países con métodos cuestionables y probablemente delictivos, como chantajes, sobornos y el recurso a sexoservidoras para después extorsionar a candidatos.

“El pasado fin de semana se reveló que Cambridge Analytica utilizó datos privados de decenas de millones de usuarios de Facebook con el propósito de inducir resultados en diversos comicios, como el referéndum sobre la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea (Brexit). Legisladores estadunidenses demandaron la realización de una investigación a fondo y es posible que el fiscal especial que investiga las anomalías en la campaña de Trump, Robert Mueller, extienda sus indagatorias a ambas empresas. Hasta el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, se sumó a las demandas de explicaciones a Facebook. Mientras tanto, en la Bolsa de Valores las acciones de esta compañía cayeron en forma estruendosa al perder cerca de 7 por ciento de su valor -lo que equivale a unos 40 mil millones de dólares- y el equipo directivo de la red social se encuentra en una crisis interna de pronóstico reservado”, señaló La Jornada en su editorial.

“La información disponible hace pertinente recordar las advertencias formuladas hace años por Julian Assange, fundador y vocero de Wikileaks, en el sentido de que Facebook era la mayor máquina de espionaje en el mundo, una aseveración que, por desgracia, ha revelado ser crudamente cierta a la luz del escándalo actual. Aunque el informador australiano se refiriera a la obsesión de la red social por cosechar información útil para propósitos de mercadotecnia, el trasiego de información de esta a Cambridge Analytica exhibe una implicación aun más sórdida, si cabe: los datos aportados en forma privada o pública por los usuarios de Facebook puede, en conjunto, realizar operaciones encubiertas de propaganda electoral y de inducción del sufragio en universos de millones de personas e incidir ilegítimamente y al margen de los mecanismos de fiscalización institucionales, en resultados electorales”, continuó el medio mexicano.

“Por lo demás, el asunto Facebook-Cambridge Analytica obliga a poner en perspectiva y en su justa medida las acusaciones, hasta ahora no probadas, de una supuesta injerencia informática del Kremlin en los pasados comicios presidenciales de Estados Unidos y en otros -el referéndum independentista de Cataluña, por ejemplo- y a concluir que esa clase de intromisiones es una realidad pero que no se origina en Moscú sino en sitios tan estadounidenses como Menlo Park, California, donde tiene su sede el gigante de las redes sociales”, finaliza el editorial.

T/ La Jornada, AFP y Agencias
F/ AFP
Londres

 

El psicólogo que ideó la aplicación de Cambridge Analytica dice que era legal

El psicólogo que desarrolló la aplicación que sirvió a Cambridge Analytica para hacerse con los datos de millones de usuarios de Facebook para fines electorales afirmó que era legal y se ajustaba a los términos de uso, difundió AFP.

Aleksandr Kogan, un profesor de psicología de la Universidad británica de Cambridge, dijo a la BBC que lo que hizo era «perfectamente legal y ajustado a los términos de servicio», y lamentó que tanto Facebook como Cambridge Analytica lo estén usando de «chivo expiatorio» al culparle del uso ilegal de datos personales.

«Mi opinión es que estoy siendo usado básicamente como un chivo expiatorio», se defendió Kogan, en el centro de un escándalo que le ha costado a Facebook perder un 9% en la bolsa de Nueva York en dos días.

«Honestamente, pensaba que actuábamos de manera apropiada, creía que hacíamos algo normal», estimó el psicólogo.

Este investigador desarrolló una aplicación llamada «This is Your Digital Life» (Esta es tu vida digital). Se trataba de una de las cientos de encuestas aparentemente inofensivas que circulan en Facebook y otras redes sociales, del tipo «¿Qué Pokemon eres tú?», o «¿Cuáles son las palabras que más usas?».

La encuesta de Kogan era un test de personalidad que preguntaba a los usuarios si son extrovertidos, vengativos, si acaban los proyectos que empiezan, si tienden a preocuparse o si les gusta el arte, entre otras muchas cosas.

El método sirvió para reunir datos de 270.000 usuarios de Facebook, pero también para hacerse con los datos de sus «amigos» en la red social.

En total, según un antiguo empleado de Cambridge Analytica, la consultora consiguió datos de 50 millones de personas que acabaron siendo usados para transmitirles mensajes electorales a medida.

Kogan fue contratado por Cambridge Analytica, uno de cuyos fundadores fue Steve Bannon, quien acabaría trabajando de estratega de campaña de Donald Trump.

De momento, la red social ha prohibido a Cambridge Analytica y a Kogan usar su plataforma, y el martes se dijo «escandalizada» por haber sido «engañada», asegurando «entender la gravedad del problema».

El interés en las actividades de Cambridge Analytica se redobló tras la emisión de un par de reportajes de Channel 4 en el que los directivos, entre ellos el presidente ejecutivo Alexander Nix, ofrecían a un periodista que se hizo pasar por cliente potencial desacreditar a sus rivales políticos tendiéndoles trampas con prostitutas o sobornos.

Tras las emisiones, la empresa británica suspendió a Nix «con efecto inmediato y a la espera de una investigación completa e independiente».

T/ AFP-Alfons Luna
F/ AFP
Londres, Reino Unido