La presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, entregó este miércoles a la Comisión de la Verdad, la Justicia, la Paz y la Tranquilidad Pública, encabezada por la presidenta de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), Delcy Rodríguez, una serie de denuncias sobre los casos de violencia perpetrados contra el Poder Electoral antes del 30 de julio.
Desde la sede del CNE, en Caracas, detalló que la documentación está ordenada estado por estado donde se presentaron estos hechos, así como agregaron 49 casos de testimonios y los tipos de violencia a los que fueron víctimas 500 trabajadores del ente comicial y cerca de 200 máquinas de votación fueron destruidas.
“Los hombres y mujeres del Poder Electoral quieren justicia, quieren que esto no se repita y que el pueblo de Venezuela no viva nunca más lo que se vivió antes y durante las elecciones de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC). El clamor de los hombres y mujeres del Poder Electoral es el clamor de toda Venezuela. Queremos justicia y queremos paz”, expresó Lucena.
La rectora acotó que desde el año 2013 el CNE está realizando denuncias sobre casos de violencia ante el Ministerio Público
En este sentido, recordó que durante los primeros seis meses del año un pequeño grupo en el país trató de llevar al pueblo a una ‘especie de locura colectiva’ que produjo la muerte y quema de personas, al igual que una serie de atentados contra las oficinas del CNE y sus trabajadores en todo el país. “No es la primera vez que el Poder Electoral hace denuncias sobre ataques violentos, desde el 2013 hemos hecho denuncias”, acotó.
Lucena explicó que debido a esta situación 150 parroquias fueron calificadas como violentas por el Poder Electoral y más de mil centros de votación fueron invalidados, por lo que manifestó que a pesar de ello, siempre se garantizó el derecho al voto.
Al respecto, mencionó que los hombres y mujeres del pueblo que trabajan durante los comicios, hicieron un esfuerzo sobrehumano para no permitir la suspensión de las elecciones a la ANC, que trajo la paz al país y derrotó la mentira, la violencia, los antivalores y la antidemocracia., llevando al CNE a crear “la orden 30 de julio, día de la soberanía y dignidad nacional para reconocer y celebrar a nuestros héroes y heroínas”.