Este viernes|Cohete Larga Marcha chino pone en órbita primer satélite ecuatoriano

Un cohete portador chino Larga Marcha 2D puso hoy en órbita el satélite ecuatoriano Pegaso desde el noroccidental centro de lanzamiento de Jiuquan, informó la Administración Estatal de Ciencia, Tecnología e Industria para la Defensa Nacional de China.

El exitoso lanzamiento de este nano satélite, diseñado y construido en Ecuador, abrió las puertas a ese país para su ingreso al selecto grupo de Estados latinoamericanos como Brasil, Argentina, México y Venezuela con presencia en el espacio cósmico.

El NEE-01 Pegaso fue puesto en órbita a 654 kilómetros de la tierra por el cohete portador chino desde el poligono de Jiuquan, una ciudad-prefectura de la provincia de Gansu que limita al norte con el desierto de Gobi.

La logística y operación de lanzamiento estuvo a cargo de la Great Wall Industry Corporation, una poderosa empresa china que ha realizado ese trabajo con Venezuela y Bolivia, entre otros países.

El polígono de Jiuquan es utilizado China para el lanzasamiento al espacio de sus naves tripuladas.

El primer satélite ecuatoriano, diseñado con fines científicos y educativos, es un cubo de 10 por 10 centímetros, con paneles de 75 centímetros y un peso de 1,2 kilogramos, el cual fue sometido a pruebas durante un año.

Según especialistas de ese país suramericano, sus componentes son aluminio, titanio, oro, plata y platino.

El pequeño artefacto, que será seguido en agosto por su similar Krysaor, es capaz de transmitir en video en tiempo real desde el espacio y supera en ese sentido a satélites que se limitan al enviar fotos.

Construido por la Agencia Espacial Ecuatoriana (AEE) con respaldo del Estado, el hecho fue celebrado por las máximas autoridades de ese país sudamericano desde Guayaquil y el lanzamiento fue transmitido en vivo por la radio y televisión de ese país, se conoció en Beijing.

Reportes desde Quayaquil indican que el astronauta Ronnie Nader, director de la AEE, supervisó desde esa ciudad ecuatoriana el despegue del satélite y recibió confirmación desde Jiquan del éxito de la operación.

El Pegaso, que abre nuevas perspectivas al desarrollo científico de Ecuador, tuvo un costo de unos 780 mil dólares, 700 mil de ellos suministrados por el gobierno de Quito.

Junto al Pegasus, China puso en órbita su satélite de observación de alta definición Gaofen-1, otros dos pequeños satélites de Argentina y Turquía y dos satélites divisorios de Holanda.

Fuente/Prensa Latina