Existe una deuda desde las artes con el líder campesino|Hurtado Rayugsen: Es un buen momento para interpretar a Zamora desde la creación

No han sido pocos los dramaturgos interesados en la figura de Ezequiel Zamora como centro de inspiración. De todos, quizás el mas destacado es César Rengifo, autor de Un tal Ezequiel Zamora y Lo que dejó la tempestad, entre otras piezas que hacen referencia al líder de la rebelión campesina de 1846 y a su tiempo. No obstante, parece evidente que no solo desde el teatro, sino desde las diferentes manifestaciones artísticas en general, existe una deuda con esta figura histórica que se mantuvo al margen hasta la llegada de la Revolución Bolivariana.

“Ezequiel Zamora es un personaje que, hasta la Revolución Bolivariana, ha sido subvalorado, vilipendiado, al que se ha intentado desconocer su gesta”, consideró el historiador y docente Omar Hurtado Rayugsen, en conversación con el Correo del Orinoco.

DESDE LA HISTORIA

A juicio del historiador, existen excelentes biografías, como la de Laureano Villanueva, también “destacado protagonista del siglo XIX”. Igualmente, de manera incidental lo trató Ramón Díaz Sánchez en su biografía de Guzmán Blanco, porque “evidentemente no podía hablar de este sin referirse a Zamora.

De acuerdo con Hurtado Rayugsen, algunos autores dedicados al tema histórico tratan a Zamora con mayor ambivalencia, tal es el caso de José Gil Fortoul en el tomo II de su Historia constitucional de Venezuela, donde señala que la Guerra Federal es en el plano social la continuación de lo que la guerra nacional de independencia logró en el plano político. En este sentido, “hay un buen tratamiento de Zamora, en cuanto a la formación positivista y la pulsión política del líder campesino”.

Le llama especialmente la atención al docente el tratamiento que hace de Zamora, José león Tapia en el libro Por aquí pasó Zamora, un texto “tal vez pequeño”, en comparación con otros, pero con una perspectiva que se coloca del lado de la gente del llano, especialmente de Barinas, sobre Ezequiel Zamora, en quien veían una suerte de reencarnación de José Tomás Bóves.

FALTA MUCHO POR HACER

Destaca además el investigador y profesor del Pedagógico de Caracas el trabajo de uno de los más acuciosos biógrafos de Ezequiel Zamora, Federico Brito Figueroa, quien dedicó buena parte de su vida a develar la mayor cantidad de detalles posibles sobre la vida, el pensamiento y la gesta de esta figura sobre el que publicó Ezequiel Zamora: un capítulo de la historia y La Venezuela del siglo XIX: tiempo de Ezequiel Zamora, en el que además de sumergirse en la infancia de este personaje e incluso en parte de la vida de su madre, Paula Correa, ofrece un cuadro panorámico de la historia venezolana del siglo XIX.

Sin embargo, para Hurtado Rayugsen falta mucho por descubrir sobre Zamora. A su entender, es tal vez esta carencia la razón del vacío, la deuda y la oscuridad que aún mantienen las diversas manifestaciones artísticas en torno a la vida, el pensamiento y la gesta de Ezequiel Zamora.

El historiador menciona apenas la película realizada prácticamente por encargo del comandante Hugo Chávez, con guión de Luis Britto García y dirección de Román Chalbaud. Por la parte de la plástica, está la pintura de Martín Tovar y Tovar que reposa en la Asamblea Nacional, imagen que se ha convertido en una suerte de matriz de donde han salido las posteriores estampas del revolucionario campesino, sin contar los bustos, tallas y estatuas realizadas, muchas de ellas, en tiempos de Hugo Chávez, ubicadas en pocas plazas, parques y estaciones de ferrocarril.

EL MOMENTO ES AHORA

Afortunadamente, en opinión del historiador, gracias a la reivindicación que ha hecho la Revolución Bolivariana, es ahora el momento propicio para que escritores, dramaturgos, guionistas, pintores y creadores en general, abreven de las investigaciones que se desarrollan actualmente y emprendan unas nuevas, con la intención de configurar en códigos artísticos nuevas interpretaciones sobre la vida de líder campesino y el pensamiento zamorano.

Aparte de autores como José León Tapia y Federico Brito Figueroa, que lo hicieron casi de manera quijotesca en sus respectivos momentos, Ezequiel Zamora “ha sido reivindicado por la Revolución Bolivariana. Porque es este un personaje incómodo para la historia oficial, para la historia que nos han querido contar, esa historia que consagra y destruye de acuerdo a su conveniencia. Zamora, con su proclama, su actuación y su conducta irreductible, es uno de los personajes más incómodos de la historia venezolana, como el Bolívar antiimperialista, como el Miranda que hablaba de la integración continental”, reflexionó el investigador.

T/ Luis Jesús González Cova
F/ Héctor Rattia
I/ Fernando Asián