Según denuncias del comisionado de DDHH de la ONU|Conflicto político en Burundi ha desplazado a 270 mil personas

Unas 270 mil personas han tenido que huir de Burundil y otras 100 mil se han desplazado internamente para evitar ser víctimas de la escalada de violencia que inició hace casi un año en ese país africano, según denuncias del comisionado de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Zeid Ra’ad al Hussein.

Según Zeid, en su rendición de cuenta en un Consejo de DDHH que se celebra en Ginebra, Suiza, desde el inicio de tercer mandato de Pierre Nkurunziza, el año pasado, la violencia en la nación africana ha ido en aumento. No obstante, a partir del mes de febrero el Gobierno ha tomado “medidas positivas”.

Sin embargo, estas medidas solo han resuelto conflictos concretos como la apertura de dos estaciones de radio, la suspensión de órdenes de arresto internacional contra 15 miembros de la oposición, de la sociedad civil y los medios y la puesta en libertad de unos 47 detenidos, indicó el comisionado enviado por la ONU desde el mes de marzo.

Dijo que desde abril se ha registrado un descenso en el número de muertos, una situación favorable para el conflicto “aunque puede ser que sea demasiado temprano para establecer una tendencia positiva”, concretó Zeid.

El comisionado recalcó que las personas que viajan hacia el país todavía se exponen a ser detenidas “por sospechas de pertenecer a un grupo rebelde”, una situación que sucede desde junio de 2015. De hecho, Zeid se manifestó consternado por la detención de cinco estudiantes solo por haber garabateado la imagen del presidente.

VIOLENCIA ÉTNICA PODRÍA REVIVIR

El comisionado de la ONU también advirtió la «posibilidad real» de que la violencia étnica aumente en el país. «En las últimas seis semanas, miembros de las antiguas fuerzas de seguridad de Burundi han sido asesinados, seguramente por pertenecer a la etnia tutsi y se han incrementado los discursos de odio contra los opositores políticos cargados con tintes étnicos”, explicó.

La etnia tutsi es un pueblo que conformaba la elite gobernante en los reinos africanos tradicionales situados en los actuales Ruanda y Burundi y en una pequeña parte de la vecina Tanzania. La etnia hutu, por su parte, es un pueblo de agricultores que forman el núcleo de población de los actuales Ruanda y Burundi.

En 1962, cuando Burundi accedió a su independencia, los jefes y cabecillas hutus, fueron casi exterminados por los tutsis. Al mismo tiempo, en Ruanda, fueron los hutus los que masacraron a miles de tutsis, obligándoles a exiliarse en Uganda y Ruanda y en 1994, ocurrió una horrible masacre en Ruanda en la que perecieron un millón de tutsis.

Este genocidio fue impulsado y permitido por las potencias extranjeras presentes en la zona para esa época, que en vez de intervenir, retiraron sus tropas bajo el pretexto de no ingerencia. La ONU, solo se limitó a redactar alguna resolución que nunca fue aplicada.

T/Telesur
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