El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) expresó el domingo su repudio a la ejecución del rehén japonés Haruna Yukawa por el grupo terrorista Estado Islámico (EI, Daesh en árabe).
Los 15 países integrantes del Consejo, repudiaron mediante un comunicado el «brutal, atroz y cobarde» acto terrorista y solicitaron la inmediata puesta en libertad del segundo rehén nipón en manos del grupo takfirí, Kenji Goto.
Para el Consejo, la ejecución vuelve a mostrar «una vez más la brutalidad (de la red terrorista), que es responsable de miles de abusos contra el pueblo sirio e iraquí».
Destacó la necesidad de enjuiciar a los terroristas que no cesan de cometer crímenes de lesa humanidad.
En un video emitido el sábado, el grupo takfirí anunció que había decapitado al rehén nipón.