La República Popular Democrática de Corea (RPDC), denunció ayer que Estados Unidos y Surcorea introdujeron varios tipos de armas pesadas en la zona meridional de la sede de reuniones de Panmunjon, paso que calificó de grave provocación militar.
Una nota de protesta enviada por la Representación del Ejército Popular de Corea (EPC) a la parte norteamericana exige detener inmediatamente esas acciones y retirar el armamento emplazado allí, según informa la agencia de noticias KCNA.
La denuncia precisa que la referida parte desplegó armamento de guerra de manera ilegal en esa área a las 07:25 hora local, el pasado día 26.
Advierte que de ser ignorada la exigencia de principio de la RPDC, la parte del EPC aplicará fuertes medidas militares en la mencionada zona.
El mensaje afirma que estos nuevos pasos demuestran que las tropas estadounidenses y el ejército surcoreano intentan provocar un choque armado en cualquier momento.
La nota oficial señala que todo ello constituye otra prueba de que Estados Unidos está atento a cualquier oportunidad para utilizar las armas nucleares contra este país, en correspondencia con su política de fuerza.
Por otra parte, el diario Rodong Sinmun, al referirse a los mencionados planes, señala que estos reafirman de donde proviene la verdadera amenaza nuclear en la Península, bajo la cual el territorio norte vive desde hace décadas, agrega.
Si Estados Unidos realmente desea la solución del problema nuclear de la Península Coreana debe cesar sus amenazas nucleares contra la RPDC, retirar sus fuerzas del Sur y poner fin a la política hostil contra Pyongyang, advierte el rotativo.