Fuerzas de Estados Unidos y Corea del Norte iniciaron este lunes maniobras conjuntas en la región del Mar Amarillo, ejercicios que amenazan con agudizar la tensión en la Península Coreana.
Estas maniobras son catalogadas por la República Popular Democrática como un ensayo de guerra en su contra.
En el ejercicio Key Resolve, que se extenderá hasta el próximo 10 de marzo, participan 12 mil efectivos del Pentágono estadounidense y 200 mil uniformados surcoreanos, incluidos reservistas. La segunda maniobra, conocida como Foal Eagle, concluirá el 30 de abril.
Fuentes del Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur dijeron que un portaaviones estadounidense participará en uno de esos ejercicios, pero que aún está por decidirse en cuál.
El inicio de las operaciones estuvo precedido por la advertencia de Corea del Norte de que rechazará cualquier provocación contra su territorio.
La situación en la Península Coreana se agravó desde el pasado 23 de noviembre, cuando Corea del Norte respondió a disparos contra sus aguas jurisdiccionales hechos por Corea del Sur, con saldo de varios muertos y heridos para ese último.
Pyongyang calificó el incidente de provocación instigada por Estados Unidos y su reacción un acto de defensa.
A principios de año, Corea del Norte propuso a su vecina del Sur sostener un diálogo con vistas a favorecer un mejoramiento de las relaciones, a lo que siguieron otras iniciativas dirigidas a disminuir las tensiones, incluidas conversaciones militares de alto nivel.
Los contactos preparatorios de esas pláticas fracasaron, resultado que la delegacion norcoreana atribuyó a la actitud provocativa asumida por la otra parte.