Coronela Marisol Terán: El 4F militares y civiles decidimos acabar con 40 años de yugo contra el pueblo

«El 4F militares y civiles decidimos acabar con 40 años de yugo contra el pueblo», así lo expresó la única mujer que participó en la rebelión militar, Marisol Terán, quien estuvo como invitada en el programa dominical «Aquí con Ernesto Villegas» conducido por el ministro del Poder Popular para la Cultura, Ernesto Villegas.

El ministro destacó que «no solo hombres se alzaron el 4 de febrero de 1992. La ahora coronela Marisol Terán, entonces con el grado de Sargento Técnico, fue la única mujer militar activa sumada a la rebelión y procesada por los hechos, quien en la entrevista contó su historia.

A Terán nada le hizo dudar de participar en la rebelión del 4F; la situación del país, las injusticias, la desfachatez de un gobierno que por muchos años asesinó o desapareció a estudiantes, a dirigentes políticos de izquierda, que mantuvo en la pobreza a millones de compatriotas. Fueron 40 años de gobiernos arrodillados al imperio norteamericano: por consciencia y patriotismo ella tenía que participar.

La formación militar de la coronela Terán estuvo llena de retos. Los cuales asumió con entusiasmo y mucho valor. Para los años 80-90 eran muy pocas las mujeres que estaban activas en el ámbito militar. Proveniente de una familia de tradición castrense, ya tenía conocimientos de lo riguroso y exigente de esa vida. Perteneciente a la primera promoción de Técnicos Superiores en el área de la Enfermería del Ejército, siempre apostó por el trabajo social y asistir al pueblo. Continúa con sus estudios en la UCV en su afán de acumular conocimientos sin imaginar el protagonismo que tendría en la historia de Venezuela.

Para el 4F Terán tenía el rango de Sargento Técnico de Tercera, y estaba destacada en la Brigada Blindada de Valencia. «Conversaba con el capitán Barrientos sobre la situación político social del país. Cuando llegó el día de la rebelión no dudé en unirme al movimiento, y lo único que dije fue «ya era hora» y si tengo que dar mi vida por el pueblo y la Patria que así sea”, señaló.

“Siempre supe de la existencia de un comandante que liderizaba la asonada militar. No lo conocía, no sabía su nombre. Toda la rebelión se estaba gestando. Había razones para ello, y más después de la masacre del 27F, en donde ordenaron dispararle al pueblo”, afirmó la coronela.

Un incidente la involucró en un intercambio de disparos entre la Guardia Nacional y su unidad militar, que se dirigía a asistir a unos supuestos heridos cerca de la Universidad de Carabobo. Este hecho la puso en contacto con los estudiantes, que eran parte de la insurrección que se estaba llevando a cabo: el pueblo y un grupo de militares querían acabar con el yugo de la supuesta democracia representativa, era el momento, debían seguir adelante.

“Los objetivos que teníamos de controlar no pudimos realizarlo. Nos avisan por radio que en Caracas tampoco. Es en ese momento cuando en nuestra unidad sacan un televisor y todos reunidos vimos por primera vez al Comandante Supremo Hugo Chávez y escuchamos sus históricas palabras: Por ahora”, refirió Marisol Terán.

Luego la hacen prisionera de la Guardia Nacional, es golpeada, y trasladada con otro grupo de efectivos “insurrectos” hacia Caracas, sin antes ver las manifestaciones de solidaridad de la tropa comprometida en la rebelión, que al despedirla, ella sintió que era como si se les había ido la esperanza: la historia demostró que no fue así.

Al llegar a Caracas la trasladaron al Regimiento de la Policía Militar en donde permaneció presa por cinco meses, sufriendo vejámenes de oficiales y tortura psicológica: nunca se quebró y asumió su responsabilidad con entereza, tal y como lo había hecho el comandante Chávez.

Luego del sobreseimiento, Terán fue cambiada de unidad y vivió el desprecio dentro de la Fuerza Armada de ese momento. Y, los acosos a su familia por parte de los organismos de seguridad e inteligencia de ese gobierno.

Hugo Chávez, una vez siendo Presidente de la República la nombra su ayudante.

Finalmente,  Marisol Terán, señaló que “mi paso de suboficial a oficial del ejército hay que agradecérselo al Gigante Chávez que en su afán de elevar a lo máximo el ser humano, hizo que las transformaciones sociales y dentro de la vida castrense misma que nos llenó de vida y de respeto por los demás.

T y F/VTV