La ciudad de Santa Cruz -en el oriente de Bolivia- declaró este lunes la alerta por chikungunya para destinar más recursos a luchar contra esa enfermedad, que contagió a 44 habitantes en menos de un mes.
La presidenta del Concejo Municipal, Angélica Zapata, explicó a periodistas que con esa medida la Alcaldía pondrá a disposición más personal y fondos con el objetivo de prevenir la expansión del virus.
Esa norma también contempla intensificar la destrucción de los criaderos de mosquitos y las campañas en los medios de comunicación con recomendaciones a seguir ante nuevos casos de chikungunya.
Santa Cruz reportó el brote el 6 de febrero, los contagiados son individuos de entre 10 y 60 años de edad, y la mayoría tuvo algún contacto con los primeros enfermos.
Desde entonces, brigadas sanitarias emprendieron las labores de fumigación, mientras 200 médicos chequean el estado de salud y buscan a pacientes con indicios de fiebre en alrededores de las casas de los infectados y de las terminales de autobuses.
Su trabajo también consiste en enseñar a combatir la enfermedad y a detectar síntomas.
La chikungunya es transmitida por los mosquitos Aedes aegypti y Aedes albopictus, y al igual que el dengue manifiesta fiebre alta, dolores articulares y de cabeza, náuseas, cansancio y erupciones cutáneas.