La compañía petrolera Chevron-Texaco busca criminalizar a los demandantes ecuatorianos afectados por las operaciones extractivistas de la transnacional estadounidense en la Amazonía, mientras estuvo en operaciones entre 1964 y 1990, dijo a la Agencia Andes, Juan Pablos Sáenz, abogado de los demandantes.
Chevron presentó hace aproximadamente año y medio una demanda en una corte estadounidense basada en la Ley Rico, destinada a combatir el crimen organizado. «Ellos aducen en EEUU que nosotros, desde las comunidades indígenas afectadas hasta los abogados, pasando por nuestros asesores en EEUU, somos una organización criminal y por ello nos están procesando bajo la Ley contra el crimen organizado, porque le han convencido al juez que nos hemos juntado para extorsionar a la pobre petrolera», manifestó el jurista.
Informó que el 15 de octubre inicará en EE.UU. el juicio de Chevron contra los demandantes y serán realizadas varias audiencias, proceso que durará alrededor de dos meses hasta tener una sentencia.
El jurista aseveró que desde hace dos años, la petrolera ha entablado varios procesos en contra de los demandantes, abogados y asesores en Estados Unidos. Los recursos fueron presentados en al menos 10 jurisdicciones estadounidenses.
Para Sáenz, el objetivo de Chevron con estos procesos era buscar un juez de cabecera que ceda ante sus peticiones y que presida una corte que puedan manipular para atacar a los afectados y sus colaboradores y lo encontraron, es el juez Lewis Kaplan, magistrado que precisamente ha emitido varios fallos a favor de la petrolera.
Con el fin de respaldar a los afectados por el daño ambiental de Chevron-Texaco en Ecuador, este miércoles fue lanzada públicamente la organización. «No más Chevron, pagas porque pagas». Tras la lectura del manifiesto del colectivo, los voceros de este frente que engloba a unas 17 organizaciones civiles, entregaron el documento al ministro de Justicia Lenin Lara.
El secretario de Estado felicitó la iniciativa y manifestó que como gobierno se hará respetar los derechos de los ecuatorianos. «Esta acción es el reflejo de la conciencia ciudadana…La lucha ciudadana en defensa del país no se detendrá. Estamos unidos para garantizar el derecho de los ecuatorianos», dijo Lara.
La compañía Texaco, adquirida posteriormente por Chevron, condenada al pago de 19 mil millones de dólares por las afectaciones ambientales a la Amazonía ecuatoriana por sus operaciones extractivistas entre 1964 y 1990, inicio hace poco una campaña de desprestigio del Ecuador, sobre todo en Argentina, donde los afectados ecuatorianos presentaron un recurso judicial para que la sentencia ecuatoriana sea reconocida en ese país andino y así poder embargar activos de la petrolera.
El presidente de la República, Rafael Correa, dijo el pasado sábado que los abogados de Chevron tratan de posesionar a nivel internacional la idea de que el Gobierno se ha involucrado en el juicio. Agregó que se fundamentan en la reunión que sostuvo con las comunidades indígenas que los demandaron.