El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) de Costa Rica solicitó a la Fiscalía del país investigar a 90 dirigentes del Partido Liberación Nacional (PLN) luego de concluir que el partido de Gobierno le cobró al Estado, dentro de sus gastos de campaña, 800 mil dólares por contratos aparentemente simulados de alquiler de carros.
En un boletín oficial, el TSE pidió investigar a diputados, asesores presidenciales y altos dirigentes del partido que llevó a la presidencia a Laura Chinchilla.
De acuerdo a la investigación del tribunal, dentro de los gastos realizados durante la campaña presidencial del 2010, los presuntos implicados cobraron al Estado por unos contratos que nunca existieron.
La investigación arrojó en algunos casos que los fondos fueron utilizados para financiar otras actividades partidistas y, en otros, no se conoce todavía qué uso se le dio al dinero.
El informe reseña el caso del actual diputado Oscar Alfaro quien supuestamente cobró unos 26 mil dólares de esos contratos y los transfirió a una cuenta bancaria. Alfaro dirigió la campaña presidencial en San José (capital).
Entre los sospechosos, que ya fueron denunciados, está el representante del país ante el Banco Centroamericano de Integración Económica (Bcie), Jorge Bolaños, quien fuese el tesorero nacional de la campaña presidencial del PLN, así como el secretario general del PLN, Alex Sibaja, y el asesor de la presidenta Chinchilla, Mario Álvarez.
Chinchilla, que el próximo lunes cumplirá su segundo año de mandato, ha visto como varios escándalos de corrupción han asediado su entorno más cercano, aunque ninguno le conecta a ella directamente.
En el último mes, dos de sus colaboradores, el ahora ex ministro de Hacienda Fernando Herrero y su esposa y ex asesora presidencial Flor Isabel Rodríguez, pusieron sus cargos a la orden del Ejecutivo al verse implicados en presuntas situaciones de fraude fiscal y violaciones a la ley de contrataciones públicas.
FUERTES CRÍTICAS DE LA OPOSICIÓN
Esta última semana, varios legisladores de tres partidos de oposición criticaron el discurso de la presidenta Chinchilla, este primero de mayo ante el Congreso, al que catalogaron de «ambiguo», «desacertado» e «incoherente».
En el discurso, Chinchilla presentó un balance de gestión ante la Asamblea Legislativa, donde legisladores de varios partidos opuestos al gobierno cuestionaron datos y descripción de supuestos logros del Poder Ejecutivo.
Para el diputado del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), Walter Céspedes, «el desacierto más notable del discurso y de este gobierno en estos dos años es que Laura puso los huevos en la misma canasta», dijo, al referirse a la insistencia por el plan fiscal por parte de Chinchilla.