El Departamento de Seguridad Interior (DSI) de Estados Unidos confirmó que comprará 360 mil rondas de municiones de punta hueca, que se sumarán a dos mil millones de balas adquiridas en 2012.
Acorde con el medio de prensa alternativa Infowars.com, el cargamento debe ser entregado en el campo de entrenamiento de Artesia, Nuevo Mexico, y se adicionará a otras 240 mil municiones compradas por la misma institución federal en febrero último.
Aunque el DSI ha intentado explicar sus motivos, autoridades en el Congreso se mostraron inconformes con la gigantesca transacción que coincide con una campaña nacional de la Casa Blanca y el Partido Demócrata en contra del comercio excesivo de armamentos.
El exmarine Richard Mason, entrevistado en Pennsylvania, aseguró que nunca en sus cuatro años de carrera tuvo que utilizar las mortíferas balas de cabeza hueca, y no comprende para que el Departamento quiere esos pertrechos, reseñó Infowars.
Este tipo de municiones es un modelo expandido de plomos que se usa mayormente para evitar la salida posterior del disparo y que cause un mayor estrago en el tejido humano interno.
La institución policial federal fue creada por el gobierno norteamericano como una de las respuestas estatales profilácticas luego de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 contra Nueva York, Virginia y Washington D.C.
En aquella ocasión expertos criticaron a la administración de George W. Bush por el fomento de un exceso de burocracia cuando ya existían organismos como la Agencia Central de Inteligencia y el Buró Federal de Investigaciones, entre otras unidades.