Desmontaje de tarantines del mercado Las Pulgas: un acto de soberanía

Ocho días han trascurrido desde la intervención militar que propició el gobernador del estado Zulia, Omar Prieto, y el alcalde de Maracaibo, Willy Casanova, al mercado Las Pulgas, ubicado en el casco central de Maracaibo.

Unos 2.500 tarantines han sido demolidos, mientras que los que aún se mantienen en pie son desvalijados por sus propios dueños, que en muchos casos tenían hasta 40 años trabajando de manera informal en esos espacios insalubres, llenos de basura, con ratas, cucarachas, aguas negras y más recientemente “paramilitares colombianos”.

Aunque los afectados protestan y se lamentan y alegan que no todos delinquían y especulaban, el alcalde de la ciudad, Willy Casanova, en entrevista para el Correo del Orinoco aseguró que en este mercado local, construido en el año 1972, se estaba erigiendo un gobierno paralelo liderado por mafias desde Maicao (Colombia). “Recuperarlo es un acto de soberanía”, dijo.

Casanova explicó que este mercado fue construido a orillas del lago de Maracaibo, lo que lo coloca en una posición estratégica para las mafias y los narcotraficantes por su salida al mar: “Desde Maicao enviaban la droga que entraba a Las Pulgas y por el lago la sacaban a otros países”.

Esta declaración del mandatario local no fue apresurada. Para hacerse de esa y otras informaciones, de las que prefirió no comentar, se valió de labores de inteligencia junto a los cuerpos de seguridad, que comenzaron a recabar datos desde hace 10 meses: “Admiro el don de mando y la valentía de nuestro gobernador, que nos permitió entrar a Las Pulgas y acabar con esas mafias”.

Origen

Pero no siempre la “calle ancha”, que mide 32 metros de ancho y que divide dos grandes módulos de los 12 bloques que tiene Las Pulgas, estuvo repleto de tarantines, toldos y mesitas.

La historia del principal centro de comercio de Maracaibo y donde se conseguía todo tipo de productos, se remonta al año 1972, cuando por orden del expresidente Rafael Caldera se construyó en un espacio de 400 metros cuadrados denominado el Periférico Las Pulgas para descongestionar el casco central, que a la fecha comenzaba a llenarse de “buhoneros”.

En la construcción de este mercado se invirtieron 10 millones de bolívares de la época. Asimismo, se construyó el mercado de mayoristas Las Playitas, que permitiría albergar a los comerciantes minoristas del Mercado Principal y La Marina, que habían sido clausurados y demolidos en el año 1970.

En el mercado Las Pulgas se alojaron, inicialmente, 2.000 trabajadores informales. En la actualidad, el mercado tiene 37.097 metros cuadrados de construcción y alberga de manera formal a 7.000 pequeños y medianos comerciantes, que ahora deberán demostrar ante las autoridades la propiedad de sus locales y tendrán que someterse al sistema biométrico del Cicpc para que se verifique la identidad de cada comerciante, así como su nacionalidad.

“Aquí todos los gobiernos locales y regionales parecían mutilados para poner orden y ejercer la autoridad”, criticó el alcalde de Maracaibo.

Delitos

Para el comandante del Destacamento 111 de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), teniente coronel Edison Miquilarena, las calles y cada espacio del mercado Las Pulgas se había convertido en un gran centro piloto para el delito.

Sorprendido por las condiciones insalubres en las que comerciantes y ciudadanos compartían, Miquilarena explicó que se encontraron casas de cambio clandestinas.

La descomposición dentro del mercado llegó al extremo de sacar de circulación billetes del nuevo cono monetario y de exigir pagos en pesos colombianos para la compra de comida y de artículos de primera necesidad.

Mil quinientos hombres y mujeres de los componentes militares participaron en la toma que hasta la fecha ha dejado a 25 personas detenidas y 18 toneladas de alimentos decomisadas. A los detenidos se les imputan cargos como boicot, acaparamiento, ilícitos cambiarios, porte ilícito de armas de fuego, distribución de drogas, delitos con el cono monetario y resistencia a la autoridad.

“Esta intervención fue un clamor por parte de la comunidad, gracias a todos los vicios que estaban concentrados por influencia extranjera”, sostuvo.

Continuó: “El colmo de este mercado era vender aguacates en 10 millones de bolívares (100 soberanos). Ya nadie recibía el billete de 100 mil bolívares, aún vigente y exigían pagos en pesos por la cantidad de ‘colombianos infiltrados’ que tenían tomados estros espacios haciéndole gran daño al país”.

El comandante del Destacamento 111 de la GNB agregó que durante los operativos arrestaron a dos hombres uniformados, quienes se hacían pasar por militares que escoltaban cavas con alimentos.

Opiniones

Para el ciudadano común, amas de casa, estudiantes y padres de familia, el gobierno regional y local se anotó unos puntos con la intervención y eliminación de los tarantines y el comercio informal, que ya ocupaban todas las vías principales del casco histórico y el centro de la ciudad.

“Hay calles que no sabía que existían, y tengo 20 años transitando por esta vía”, refirió María García, trabajadora bancaria.

“Me alegro mucho que les haya caído el Gobierno, esa gente era tan depravada que los pesos los tenían expresados en libras y no en kilos, amén de otros abusos”, dijo Carlos Sánchez.

“Las Pulgas es el sitio más asqueroso que tiene Maracaibo. En medio de las aguas negras vendían carnes, víveres y todo tipo de alimentos y a nosotros nos tocaba meternos en esa inmundicia porque se conseguía de todo y más económico, pero estamos claros que eso es un nido de delincuentes y bachaqueros, tomado por las mafias desde hace muchos años”, aclaró Mario Suárez, residente en el sector Santa Lucía.

Por otra parte, la realidad para muchos trabajadores informales es dura, ya que habían hecho del comercio informal un modo de vida y muchos tenían hasta 40 años en estos espacios.

María González pagó por un espacio en las adyacencias del Unicentro Las Pulgas hace 40 años. Junto a su esposo pagó al condominio del centro comercial y al ayuntamiento por un permiso para instalar una mesa donde vendía ropa. Hoy se siente “expropiada” y engañada por los dueños del centro comercial, quienes decidieron lavarse las manos y olvidar el contrato comercial que mantenían: “Hoy me echan y me toca recoger mi mesa que con tanto esfuerzo monté y que me permitió darles comida y estudio a mis hijos”.

Para Junior Montiel este operativo solo saca de circulación al comerciante humilde, pero deja intactas a las mafias que, según él, continúan operando impunemente en el Centro Comercial Plaza Lago, vecino del mercado Las Pulgas. “Nos robaron todo, la mercancía y el dinero. Este es nuestro único sustento. La verdad es que sí especulamos las dos últimas semanas, pero la culpa no fue nuestra, si a nosotros nos venden los productos caros, no podemos venderlos baratos”.

Según representantes de la Asociación de Buhoneros de Las Pulgas, la operación cívico-militar deja sin empleo a más de 500 mil personas, quienes no podrán instalarse en ninguna calle de Maracaibo, puesto que las autoridades no permitirán más economía informal.

Otras intervenciones

Otro mercado intervenido por las autoridades fue el mercado municipal Simón Bolívar, ubicado al frente del mercado Las Pulgas y Las Playitas. En las instalaciones se detectó un monopolio de los comercios: “Una sola persona, arquitecta de la pasada gestión local, tiene más de 80 locales, donde se guardaban los alimentos que luego se revendían a precios especulativos, es por eso que los declaramos de utilidad pública y allí serán reubicados algunos de los trabajadores informales que fueron desalojados de Las Pulgas”, aclaró el alcalde de Maracaibo, Willy Casanova.

Dijo que de un total de 560 locales, solo 100 se encuentran operativos, el resto era utilizado como depósitos “para las mafias que operaban en el mercado Las Pulgas”.

Finalmente, el mandatario local firmó el decreto 0036, que establece la intervención de los mercados privados y centros comerciales situados en la periferia del casco central, como parte del plan de saneamiento que se ejecuta. Los mercados a intervenir serán Las Playitas, Callejón de los Pobres, La Redoma, Plaza Lago y Bingo Reyna.

Casanova destacó que estas acciones forman parte del Plan de Recuperación, Crecimiento y Prosperidad Económica implementado por el presidente Nicolás Maduro: “Tenemos la tarea y la obligación de hacer respetar el cono monetario y la reconversión para proteger el salario de nuestro pueblo, garantizando que nuevamente tengamos la paz económica que solamente la Revolución le puede brindar a los venezolanos”, expresó.

Valores agregados

«La intervención en el mercado Las Pulgas no es momentánea, es definitiva y absoluta», recalcó el gobernador del Zulia, Omar Prieto.

Se instalará una comisión con 20 representantes de los comerciantes, quienes se reunirán con el alcalde Willy Casanova.

“Si hay algún colombiano indocumentado en los mercados, se remitirá a la frontera de su país de manera inmediata, y ciudadano que esté solicitado por la justicia venezolana inmediatamente será puesto a orden del Ministerio Público”, anunció Prieto.

El alcalde Casanova aseguró que en Las Pulgas se fraguaban planes para desestabilizar la economía de todo el estado Zulia.

T/ Yajaira Iglesias
F/ Cortesía Juan Marín
Maracaibo