La Fiscalía General de Egipto ordenó este miércoles la detención durante 15 días del ex presidente de esa nación del noreste de África, Hosni Mubarak, pese a que se encuentra internado en un centro hospitalario de la localidad de Sharm El-Sheikh por alegados problemas cardíacos.
De acuerdo con la televisión estatal egipcia, la medida judicial afecta también a los dos hijos de Mubarak, Alaa y Gamal, quienes fueron sometidos a interrogatorio por su presunta responsabilidad en varios delitos, reseña TeleSur en su página Web.
Versiones extraoficiales refieren que ambos hijos del ex mandatario egipcio fueron detenidos poco después de que su padre sufrió una indisposición cardíaca y fue ingresado, y que a ambos se les trasladó desde Sharm El-Sheikh a una prisión en El Cairo, la capital de la nación árabe.
Gamal Mubarak, el hijo menor del ex presidente, era considerado su posible sucesor y ocupó cargos de dirección en el otrora gobernante Partido Nacional Democrático.
La indagatoria realizada en la mencionada localidad, donde todos permanecían bajo arresto domiciliario desde hacía varias semanas, se centró en la violencia y la muerte de más de 840 manifestantes durante las protestas que derrocaron al gobernante.
Asimismo se les imputa abuso de poder, corrupción y malversación de fondos públicos, cargos por los que también está tras las rejas desde hace dos días el ex primer ministro Ahmed Nazif.
Mubarak, de 82 años y que en 2010 fue sometido a una intervención quirúrgica de vesícula en Alemania, continúa ingresado en la clínica internacional de Sharm El-Sheikh acompañado por su esposa Suzanne y sus dos nietas, pero rodeado de un fuerte dispositivo de seguridad.
La semana pasada, a raíz de las protestas en El Cairo para exigir se le enjuiciara, muchos egipcios amenazaron con desplazarse hasta la localidad del sur de la Península del Sinaí para forzar una acción de las autoridades, lo cual obligó a reforzar la presencia policial.
Desde anoche, según imágenes mostradas por la televisión nacional, se registraron concentraciones frente al centro asistencial para protestar contra lo que se cree es un ardid del antiguo estadista para tratar de evadir la severidad de la justicia.
Según un parte médico confirmado por el ministro de Salud, Ashraf Hatem, el depuesto mandatario estaba en situación estable, aunque en cuidados intensivos, luego de ser ingresado de manera repentina por un «ataque ligero al corazón» mientras era interrogado por investigadores.
El 11 de febrero, Mubarak puso fin a 30 años de poder tras 18 días de vigorosas protestas populares en Egipto, durante las cuales perdieron la vida más de 840 manifestantes a causa de la represión policial, de acuerdo con un balance reciente del Ministerio de Salud.