La diputada mexicana Laura Imelda Pérez Segura: «Estamos reconstruyendo el país desde los escombros»

Laura Imelda Pérez Segura se siente parte del proceso de renovación política en México. De visita en Buenos Aires para participar del «IV Encuentro de Congresistas por Justicia Fiscal», esta joven diputada del Morena destaca los principales logros y desafíos del gobierno a un año de la asunción presidencial de Andrés Manuel López Obrador. En diálogo con Página/12, se refiere a la posición del Estado frente al narcotráfico y marca los principales lineamientos de su política migratoria. También le dedica unas palabras a los estallidos sociales que se repiten en Latinoamérica, con la esperanza de que el progresismo unido pueda enfrentar a la derecha en la región.

-Se acaba de cumplir un año de gobierno de López Obrador en México. ¿Qué balance realiza?

-Lo primero que debo decir es que estamos reconstruyendo el país desde los escombros. En los últimos años se realizaron reformas llamadas estructurales que fueron muy dañinas para el país y redundaron en una pérdida de derechos laborales, en una pérdida de soberanía. Ahora estamos todavía dentro de un período de prueba, en el que se están revisando cómo van avanzando las nuevas políticas públicas. Recientemente en un mitin en El Zócalo, en el centro de la ciudad de México, el presidente destacó que 89 de las 100 propuestas de campaña que le presentamos a la ciudadanía se han cumplido. Lo cual no es poco. Hay un proyecto de país compartido tanto por el Ejecutivo como por el Legislativo.

-Dentro de ese proyecto de país que menciona, ¿qué políticas destaca del gobierno de AMLO?

-Sin duda los programas sociales. Han sido un elemento central en esta idea compartida de que primero están los pobres, a lo cual le agrego: primero el sur del país, que ha sido históricamente olvidado. Allí se están impulsando programas sociales que están en su período de inicio. Por ejemplo, la creación de un tren que va a atravesar toda la zona sur y que va a generar empleo y reactivación económica. Creo además que es muy importante la irrupción de nuevos personajes tanto en el Ejecutivo como en el Legislativo. Somos un grupo de personas que no habíamos participado antes en política.

-La violencia y el narcotráfico siguen siendo temas urgentes en México. ¿Cuál es la postura del gobierno frente a esa problemática?

-Lo primero que hizo nuestro gobierno fue actuar de manera responsable. Venimos de un gobierno absolutamente complaciente (Enrique Peña Nieto), y uno anterior a ese gobierno (Felipe Calderón) que propuso una declarada guerra contra el narco que dejó miles de muertos. En este gobierno por supuesto se están planteando estrategias, pero lo primero es actuar de manera responsable frente al crimen organizado. La creación de la Guardia Nacional es un gran acierto. Está en proceso de capacitación, y empieza a actuar muy bien en distintas regiones del país. Creemos que la colaboración es importante pero tampoco vamos a permitir lo que pasó con el presidente Trump, que declaró que iba a categorizar como terroristas a las bandas del narcotráfico. Y ya sabemos lo que eso implica.

-¿Cómo se posiciona el Estado frente a los miles de mexicanos que buscan migrar a Estados Unidos cada año?

-Para nosotros, primero hay que ayudar a que se den las condiciones para que la migración que se da en el territorio sea voluntaria y no forzada. Antes de buscar un acuerdo con el país vecino, debemos buscar que la gente en nuestro país tenga las oportunidades para poder quedarse cerca de su familia. Entre otras estrategias que plantea el gobierno hay un programa social que es Sembrando Vida, en el que se contrata de manera permanente gente de las zonas rurales para sembrar y reforestar, dando tanto un empleo como una contribución al medio ambiente. Tenemos problemas graves de seguridad en la zona sur porque por supuesto dentro de esas caravanas que pasan hay gente que no trae las mejores intenciones. Sin embargo, no buscamos generalizar ni caer en la xenofobia.

-¿Cuál es su mirada respecto a los estallidos sociales que se replican en distintas partes del mundo, pero particularmente en Latinoamérica?

El capitalismo salvaje llega a un punto en que es insostenible a largo plazo. Lamentablemente el principal culpable no es tangible ni fácilmente identificable. Simplemente los estragos se sienten en la violencia estatal, en el deterioro del medio ambiente, en la fatiga de la gente que se siente explotada por las grandes empresas. Se siente en la falta de derechos, la falta de democracia, la falta de derechos laborales. Esto provoca reacciones difusas pero que de alguna manera obedecen a lo mismo: el dominio del poder económico sobre cualquier causa social.

-Frente a un rebrote de la derecha en la región, quedan pocos focos progresistas como el caso de Alberto Fernández en Argentina o el propio AMLO en México.

-Creo que es una gran responsabilidad para ambos. Estamos pensando en una red de parlamentarios progresistas de América Latina para impulsar y fortalecer iniciativas, pero por supuesto los ejecutivos tendrán que hacer lo propio. Se tienen que tomar estrategias conjuntas para responder a los ataques mediáticos, para formar acciones contra la corrupción, para trabajar sobre la migración, las drogas, el tráfico de armas. Se deben fortalecer los organismos internacionales de manera democrática. La Patria Grande tiene que estar por encima de las estrategias que se articulen para golpear a los gobiernos legítimos de América Latina. Ya lo vimos con Lula, ya lo vimos con Correa, afortunadamente aquí en Argentina están de fiesta, pero necesitamos fortalecer esos lazos y enfrentar de manera hermanada esos ataques que por supuesto vienen articulados desde el norte.

FyF/Pagina12