El periodista y poeta describe los acontecimientos del golpe de Estado de abril como un torbellino de hechos, de dramas y pasiones humanas, que no pueden ser plasmados con el lenguaje común. De la orgía contrarrevolucionaria en Miraflores se pasó al festejo popular con el retorno de Chávez. Han sido 16 años de vértigo
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Para Earle Herrera, en estos 18 años de Revolución Bolivariana hemos vivido en una especie de vértigo en el que las cosas y los hechos transcurren rápidamente y se pasa de un suceso a otro, en marchas y contramarchas, sin solución de continuidad. Afirma que plasmar los acontecimientos de abril requiere del auxilio del arte, de la pintura, la literatura, la dramaturgia, la música, ya que el dolor, la angustia, el drama, las lágrimas, las sonrisas, no se pueden describir en toda su intensidad con el lenguaje cotidiano y periodístico.
Señala que los golpistas derrotados en aquella fecha (abril del 2002) de ninguna manera han cesado en su empeño de dar al traste con la Revolución Bolivariana, ya que esa es una decisión tomada por el imperio estadounidense. Derrotar la Revolución Bolivariana es un objetivo estratégico que permitiría frustrar la integración de América Latina y cortar las esperanzas de los pueblos del mundo.
“De manera que esta es una batalla que continúa y, como decía un amigo, mientras haya Revolución, la contrarrevolución estará allí al acecho. En estos 16 años han cambiado demasiadas cosas. Ha habido un proceso de formación política, de ideologización y participación popular, tanto en el pueblo como a lo interno de las fuerzas Armadas, por eso es que nosotros hemos podido mantener este proceso hasta el sol de hoy y conmemorar estos 16 años”.
Considera que en todo este panorama de resistencia popular emerge un proceso de siembra ideológica y política del comandante Chávez, quien ejerció una pedagogía durante la década larga que estuvo en el poder; eso está sembrado en el corazón del pueblo y su conciencia, en su formación. Por ello señala que este pueblo no es el mismo de aquel de 2002, aunque ya en aquella oportunidad supo responder.
“En este momento tiene mejores armas y no me refiero a armamento militar, sino al aspecto cultural, político, de formación, organizativo. Ese es el legado del comandante Chávez, allí está la permanencia permanente de el líder de la Revolución Bolivariana”, agrega.
–¿Qué sintió usted cuando Chávez partió hacia Fuerte Tiuna?
-La verdad es que fueron momentos muy vertiginosos. Más que un político, se necesita un dramaturgo, un novelista, que narre la épica de aquellos días. Pasamos de un sentimiento a otro sin solución de continuidad. Quienes en unas horas estábamos sufriendo, a las pocas horas estábamos celebrando y viceversa. Nosotros, con aprensión, con tristeza y en muchos casos con impotencia, vimos cómo Chávez se dirigía a Fuerte Tiuna, donde lo esperaban sus carceleros, y a la vuelta de 48 horas lo teníamos de vuelta en Miraflores. Y quienes habían aplaudido en aquella orgía de poder de las clases dominantes, de Fedecámaras, andaban huyendo y corriendo por los pasillos del palacio. De manera que como políticos, nunca vamos a captar el drama que se vivió en esos momentos. Quizá a través de la poesía, de la pintura, de la música, se pueda recrear lo acontecido, pero con el lenguaje directo, cotidiano, incluso ni con el lenguaje del periodismo podemos recoger lo que ocurrió en esos momentos. Tiene el periodismo que llenarse de literatura, de teatro, plastificar su lenguaje para captar el drama humano de aquellos días.
El lugar que le corresponde
Indica Earle Herrera, periodista y poeta, y miembro de la ANC, que si lo apuran mucho puede decir que en este vértigo hemos vivido 16 años.
“La violencia siempre ha estado presente, pero también la respuesta popular. Venezuela ha sido el centro de un agresión imperialista de Europa, de los Estados Unidos, de las fuerzas reaccionarias internas, que no han cesado ni un momento, pero también la respuesta de la Revolución ha sido el rayo que no cesa de Miguel Hernández”, asienta.
Relata que durante los hechos de abril de 2002 estaba dedicado a sus funciones periodísticas y que hubo compatriotas que le ofrecieron sacarlo del país.
“Pero mi puesto no estaba afuera sino aquí y sigue estando aquí”, confiesa.
Sobre el papel de los medios, coincide en que fue un golpe mediático.
“El mismo almirante Ramírez Pérez (uno de los conjurados) dijo que su poder de fuego fueron los medios de comunicación social. Nunca antes quedaron tan expuestos los medios de comunicación social, su falta de ética y, por supuesto, quedó al desnudo que los grandes medios de comunicación social forman parte y formaban parte de eso que se llama el Pacto de Punto Fijo; eran la cuarta parte de esa pacto que se derrumbó ese día.
–¿Todavía siguen conspirando?
-Eso lo dice usted, su palabra vaya adelante. Yo creo que seguimos en el terreno de batalla. El pueblo de Venezuela ha hecho permanente el 13 de abril, que fue el día de la victoria. Que todos los días sean 13 para que no ocurran más 11. Es mantenerse alerta y en el campo de batalla.
T/ Manuel Abrizo
F/ Héctor Rattia, Gustavo Frisneda
Caracas
Se mantendrán movilizados hasta que liberen al expresidente
Estudiantes de la ELAM rechazan acciones de la derecha brasileña contra Lula da Silva
Estudiantes internacionalistas de la Escuela Latinoamericana de Medicina Dr. Salvador Allende (ELAM) rechazaron las acciones de la derecha brasileña en contra del expresidente Luis Ignacio Lula da Silva, quien esta preso desde el pasado 7 de abril en la Policía Federal de Curitibia, luego de ser acusado de corrupción sin pruebas.
Así lo dio a conocer Jeandro Alves, integrante del Movimiento de los Trabajadores Sin Tierra (MTS) de Brasil en el acto de solidaridad que se realizó ayer en la plaza Morelos de Bellas Artes en Caracas.
“Brasil está atravesando una crisis política. Los gobernantes de la derecha saben que si Lula está libre gana las elecciones presidenciales, y el capitalismo no podrá implementar sus políticas destructivas contra el pueblo”, aseveró el estudiante.
Alves destacó: “Necesitamos un gobierno humanista, que esté abierto a atender las necesidades de las comunidades”.
Por su parte, Sandino Carvacho, brasileño e integrante del Movimiento de los Trabajadores Sin Tierra de Brasil, declaró que la concentración tiene como objetivo apoyar al mejor líder político que ha tenido Brasil, Luis Ignacio Lula da Silva, quien es inocente de todas las acusaciones.
“Vamos a salir de las calles solo cuando Lula da Silva quede libre”, dijo. Hizo un llamado a todos los jóvenes de Latinoamérica a unirse a esta causa justa por Lula.
