EcoGym Waraira: un espacio de entrenamiento con conciencia ecológica

En el corazón del Waraira Repano nació el 10 de enero de este año un gimnasio ecológico, un espacio donde se entrena con conciencia y con materiales 100% reciclables.

Así lo dio a conocer el creador de este emprendimiento, José Manuel Marcano, quien hizo su deseo realidad de la mano de otros tres soñadores: Mariby Pérez, Abraham García y Diego Romay.

Ese gran sueño se llama EcoGym Waraira y se puede llegar a él a través de La Pastora, por el conocido Camino Real de los Españoles. Sus espacios están al aire libre y se puede acceder de lunes a lunes, siempre contactando su principal entrenador a través de Instagram @ecogymwaraira.

El camino de emprender

Marcano, profesor de Educación Física y entrenador personal, trabajó en varios colegios y luego sintió la necesidad de emprender en su propio negocio, de crear una marca personal, de crear un emprendimiento propio.

En el año 2019, aproximadamente, durante la certificación como entrenador personal le enseñaron que debía estar en redes sociales, crear una marca, abrir una cuenta en Instagram. «De ahí fue el proceso de empezar a desarrollarme, encontrar clientes, primero de boca a boca porque no manejaba bien las redes», reiteró el profesional del deporte.

Reciclaje, una prioridad

Cuando José Manuel inició entrenamientos a domicilio su primera clienta fue Mariby Pérez, quien le dio la idea de hacer un gimnasio con materiales reciclables como las tripas de cauchos, por ejemplo. Él no podía comprar máquinas costosas, ni implementos caros, así que ideó todo un sistema de entrenamiento con material que, mayormente, la gente echa a la basura.

«Las tripas de cauchos eran muy accesibles, entonces yo llenaba mis tripas de arena y con eso iba a entrenar a mi gente».

Para enero de este año fue inaugurado EcoGym Waraira, completamente diseñado con cauchos de automóviles, toda la estructura, incluyendo el soporte de la montaña (está construido sobre la casa de José Manuel) tiene más de 800 cauchos, muchos de ellos recuperados en caucheras y quebradas (pequeños riachuelos) donde eran echados como basura.

«Desde que forjé la idea hasta llevarla a la realidad me tardé 6 meses, porque tenía que hacer un muro de cauchos, luego utilice herramientas de reciclaje creativo. Contamos ahora con máquinas muy parecidas a un gimnasio convencional, pero todo con material ecológico y reciclable”, destacó.

Agregó: «Yo pienso expandir EcoGym a otros lugares, EcoGym Portugal, EcoGym Valencia, EcoGym México, es decir, llevarlo a otros lugares, que otras personas lo puedan hacer. Estamos pensando crear una fundación para apoyar a personas de bajos recursos que desean hacer un gimnasio ecológico».

«La palabra no puedo no existe»

En EcoGym Waraira no solo se entrena el cuerpo, sino también el espíritu y la mente. Muchas veces el cuerpo tiene la capacidad para hacer determinados ejercicios, pero la mente dice «no puedo».

José Manuel nos dijo que en su emprendimiento «la palabra no puedo no existe, nosotros la cambiamos por: hasta aquí puedo, mañana voy a poder».

Los entrenamientos son desde el positivismo, nunca desde las ideas limitantes. EcoGym Waraira tiene esa particularidad, entrenas tu cuerpo, pero también tienes contacto con la naturaleza y fortaleces tu espíritu y tu pensamiento. El equilibrio del ser humano en un concepto realmente innovador.

T/CO
F/Cortesía