La debilidad del dólar ante el euro favoreció este lunes al oro, considerado uno de los refugios más socorridos en tiempos de crisis, como el actual.
El retroceso del billete verde ocasiona que las materias primas denominadas en esa divisa sean más baratas para los tenedores de otras monedas.
Dicho mercado también estaba atento a los conflictos en Oriente Medio y a la compleja situación fiscal en Estados Unidos.
En ese entorno, el precio del oro subió 0,61 por ciento y se vendió a mil 723 dólares la onza.
Analistas pronostican que el incremento de la demanda determinará un alza de los valores hasta alcanzar los mil 843 dólares la onza en septiembre de 2013.
Las estimaciones se basan en las expectativas del crecimiento de los pedidos en Asia, principalmente en China, y en la continuación de la política monetaria expansiva de Estados Unidos
Según los expertos, el gigante asiático, podría superar a India como el principal consumidor mundial de oro, por tener una demanda resistente, pese a la desaceleración de los últimos dos años.
El metal precioso alcanzó un máximo histórico de más de mil 920 dólares la onza en septiembre de 2011 y subió 10 por ciento el año pasado.
En lo que va de 2012 acumula un avance de 10 puntos.
A largo plazo, prevén que el oro se beneficiará de la incertidumbre generada por lo que los expertos llaman el abismo fiscal en Estados Unidos, una combinación de alzas de impuestos y recortes de gastos que podría hundir a la nación norteña en recesión si no logra alcanzar un acuerdo para recortar su déficit.