El Papa Francisco criticó este sábado el sistema económico al asegurar que pone en el centro al «dios dinero» y no a los hombres.
Asimismo, el Pontífice reclamó que los jóvenes sin trabajos dignos son «el sacrificio que esta sociedad mundana y egoísta ofrece al dios dinero que está en el centro de nuestro sistema económico mundial».
Explicó que los jóvenes experimentan la falta de dignidad a causa de la precariedad en el trabajo. Por este motivo, exigió una respuesta «rápida y con fuerza» para resolver esta situación injusta.
Además, Francisco condenó la «cultura del descarte» aplicada a los niños»porque no nacen, se les explota o se les mata antes de nacer», así como a los ancianos «porque no tienen una atención digna, no tienen mediciones y tienen pensiones miserables».
Francisco lamentó que exista tanta desigualdad en el mundo, por lo que indicó que se deben «proponer alternativas justas y solidarias que sean realmente practicable». El Papa ofreció estas declaraciones durante una audiencia con las Asociaciones Cristianas de Trabajadores Italianos, que celebran el 70 aniversario de su fundación.