El Gobierno del presidente ecuatoriano, Rafael Correa, quien preside la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), convocó a los cancilleres de los países que integran esta organización suramericana a una reunión extraordinaria para la semana entrante en la ciudad de Quito (Ecuador), con el objeto de tratar el tema sobre el rompimiento de relaciones entre Colombia y Venezuela.
La información fue divulgada a través de un comunicado de la cancillería ecuatoriana, donde explica que a petición del Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela, el gobierno ecuatoriano convocó la reunión extraordinaria con el objetivo de fortalecer el diálogo y la paz en la Región.
En este sentido, el Jefe de Estado ecuatoriano, planteó la posibilidad de convocar una reunión de mandatarios del organismo sudamericano y señaló que interpondrá sus buenos oficios para resolver la crisis entre Bogotá y Caracas «lo más rápido posible».
«Podemos obviamente en ese espacio atender la solicitud del presidente Chávez para reunirnos los presidentes de la región, al menos de América del Sur, y tratar de ver cómo mediamos y resolvemos este conflicto bastante lamentable», dijo Correa.
Por su parte, el embajador ecuatoriano, Ricardo Patiño responsabilizó al Secretario General de la OEA, José Miguel Insulza por la situación presentada entre los dos países vecinos, pues de haber acogido la petición de Quito para posponer la sesión mientras se realizaban consultas con el Consejo Permanente del organismo interamericano, Colombia y Venezuela no hubiesen llegado a romper las relaciones.
La reunión fue solicitada por el canciller venezolano, Nicolás Maduro, tras denunciar las graves agresiones de Bogotá hacia Caracas, luego que el embajador colombiano en la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Hoyos, acusara al gobierno de Hugo Chávez de respaldar la supuesta presencia de guerrilleros colombianos en territorio venezolano.