Las autoridades de las Islas Galápagos buscan controlar natalidad a través de una normativa extra a la ley especial regente para evitar la sobrepoblación y proteger este enclave natural Patrimonio de la Humanidad.
Los residentes en estas ínsulas de Ecuador se incrementaron de mil 300 en 1950 a 25 mil en 2010, mientras hace unos 30 años llegaban a sus costas unos 20 mil visitantes al año y en 2011 entraron 185 mil.
La migración es otro de los temas que se revisará una vez que en este territorio ultramarino de Ecuador solo está permitido que puedan vivir residentes permanentes o temporales.
Sin embargo, la legislación actual no contempla sanciones para quienes violen este acápite.
Edwin Naula, director del Parque Nacional Galápagos, aseguró que se busca lograr un desarrollo sostenible de este territorio estratégico, sin provocar trastornos y efectos irreversibles en su ecosistema.
Uno de los promotores de limitar la población con ese propósito ha sido el ministro de Turismo, Freddy Ehlers.
Galápagos está declarado Patrimonio de la Humanidad y se maneja como un territorio protegido que está bajo el control básicamente del Parque Nacional que lleva el nombre del archipiélago.
A tales efectos existe la Ley Especial de Galápagos, que, entre otros asuntos, declara al mar que rodea las islas como zona protegida y permite solo la pesca artesanal.
Una de las aspiraciones es que se encuentren los parámetros para el funcionamiento de los negocios para evitar daños al medioambiente.
Al mismo tiempo se busca lograr mejores condiciones de vida de quienes viven en este lugar.
Recientemente fue creada la Agencia para la Bioseguridad para el Archipiélago, para reforzar el ingreso de especies invasivas, como perros, gatos o ratas que terminan compitiendo y eliminando las especies locales.
Virgilio Hernández, presidente de la Comisión de Gobiernos Autónomos, expresó que la reforma en marcha es de interés mundial por la importancia de las islas como patrimonio natural.
El legislador indicó que son cuatro puntos básicos los que esperan tratar para la nueva normativa, como son las competencias, migración, inversiones y los controles.
Las medidas buscan la protección de las 10 especies de tortugas gigantes que habitan estas ínsulas tras la extinción ya de al menos cuatro de estas.
En 1979 la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y Educación (Unesco) declaró a las Islas Galápagos como Patrimonio Natural de la Humanidad, y seis años más tarde como Reserva de la Biosfera (1985).
También en el 2007 la Unesco las declaró como Patrimonio de la Humanidad en riesgo medioambiental.