“Nunca dejes de mirar la bola”, recalca el exinfielder
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Bravos de Margarita recibió 2021 como el equipo más ganador de la presente temporada al ser el único en exhibir 18 triunfos a estas alturas del certamen. En lo que va de este híbrido de última semana de 2020 y período inicial de 2021, el equipo se ha esmerado en dejar contundentes pruebas de su ofensiva. Una de ellas fue la semana, cuando dejó nueva marca de anotadas para un club en un juego de la LVBP, al lograr 26 contra el Zulia.
Como sucede en la mayoría de las historias, siempre existe el héroe anónimo. Aquel con gran peso en la trama, pero que siempre está oculto a la sombra. O que tal vez está visible, pero el interés por otros detalles, hace que la vista le esquive, según analiza José Luis López para prensa LVBP.
Bravos no es la excepción y también tiene su héroe anónimo. Un hombre que brilló en otros tiempos, en otras circunstancias y que hoy cumple el papel de instructor de bateo. Ese caballero es Eddy Díaz. Quien se encarga de mantener afinados los maderos del carro de leña insular.
Hay que recordar que Bravos apenas practicó un día antes de iniciar la campaña. Incluso debió pedir un día extra para saltar al terreno en más o menos condiciones aceptables. Por ello, todos se preguntan cuál milagro se ha obrado en los insulares.
SED DE GANAR
“Esa pregunta es recurrente. A simple vista es difícil entender nuestra buena situación con un entrenamiento tan corto. La respuesta está en las ganas de estos muchachos, que no solo querían competir. También traían su deseo de ganar un campeonato y un gran espíritu de lucha, derrochado en cada juego y en cada práctica. Fíjense que para nosotros los peloteros, un día libre es cosa sagrada. Sin embargo, en los días libres que tiene el equipo, todos deseen practicar y mantener el tono, de cara a los objetivos que nos hemos trazado. Además, el cuerpo técnico también da el ejemplo”, sentenció Eddy Díaz, actual coach de bate de los fúricos.
“Trabajamos fuerte cada día. Desde el mánager Henry Blanco hasta pasar por José Ceballos, Luis Maza, Larry Curiel, Iván Arteaga, Omar Bencomo (padre) y mi persona. Todos tenemos las ganas en sintonía, con lo cual se establece un grupo armónico entre técnicos y jugadores. Desde el principio, los técnicos hemos estado compenetrados con los peloteros, pendientes de todo detalle. Los muchachos han respondido y por ello estoy seguro que Bravos estará en la postemporada y llegará también a su primera final”, sentenció el exinfielder.
En una carrera que abarcó quince zafras entre 1990 y 2008 en la LVBP, principalmente con Navegantes del Magallanes, Eddy acostumbró a la fanaticada a dar batazos oportunos en los momentos más importantes.
Y ese fue su cantar a nivel doméstico, como en las menores, en los veranos mexicanos y en el poco tiempo que estuvo en las mayores con Cerveceros de Milwaukee y en la pelota del Lejano Oriente: “Siempre utilizo con los muchachos, la misma filosofía sobre la cual construí mi carrera como jugador: trabajo, dedicación, constancia y amor al beisbol ¿Cómo hago para inculcarle esas lecciones a mis jugadores? Les indico qué hacía yo cuando era activista: nunca dejes de mirar la bola cuando la suelte el lanzador. Quédense un poco atrás en el swing. No se abran en la caja de bateo y hacer buenos contactos. Los muchachos han asimilado muy bien esas nociones y los resultados están a la vista”.
Eddy Díaz regó los estadios venezolanos con 447 imparable en la LVBP. Logró 106 dobles, seis triples, 24 jonrones y remolcó 208 Al colgar el guante dejó impresa línea ofensiva de .256/.264 /.356 con OPS de .620. Vale decir que tuvo a una verdadera constelación en calidad de compañeros: Johan Santana, Freddy García, Melvin Mora, Edgardo Alfonzo, Carlos García, Oscar Azócar. No era fácil abrirse paso en el Magallanes de los 90 y gran parte de la década inicial del nuevo siglo.
“Esta versión de Bravos me hace recordar aquel Magallanes de los 90, con aquellos grandes nombres y estupendos importados. Era un club con mucho talento, tal cual ocurre con Bravos en la actualidad. A pesar de ser un club muy joven, posee inmensas ganas de ganar, como sucedía en aquellos Navegantes. Fue un orgullo para mi ser parte de aquel equipo, como hoy lo es pertenecer a un club tan pujante como esta versión de Margarita”, recalcó el hoy técnico.
“Este trabajo me produce inmensa satisfacción, pues desde el primer día se ha notado el interés de los muchachos por aprender. Jugadores como Dennis Ortega y Breyvic Valera han trabajado duro. Preguntan, desean aprender cada vez más. Y cuando vemos sus actuaciones, comprendemos que vamos por el camino correcto. Otros ejemplos que puedo citar son el campocorto José Alexander Martínez, una de las sensaciones del campeonato y el jardinero Diego Rincones. Esos muchachos trabajan fuerte, lo mismo que David Rodríguez y Luis Castro. Ponen de su parte en cada día, en cada práctica. Y produce onda satisfacción cuando vemos que eso que tanto entrenan, lo ejecutan con soltura y brillantez en el campo de juego contra los clubes rivales”, agregó sin titubear.