A fin de destinarlo a la obra centro cultural y sede del Consejo Federal de Gobierno|Edificio Junín será restaurado para sede del Consejo Federal de Gobierno

Entró en vigencia el decreto presidencial mediante el cual se ordena la adquisición forzosa del lote de terreno y edificio denominado Junín, en el Centro de Caracas, a fin de destinarlo a la obra centro cultural y sede del Consejo Federal de Gobierno.

Se trata del decreto presidencial número 7.807, publicado en la Gaceta Oficial número 39.584, de fecha jueves 30 de diciembre de 2010.

Dicho edificio se ubica exactamente en el ángulo Noreste de la esquina de Aserradero, intersección de las calles Sur 8 y Oeste 6, en jurisdicción de la parroquia Catedral de Caracas.

Se procederá a la reconstrucción y restauración del edificio Junín, proyecto que será ejecutado mediante la Vicepresidencia de la República de manera directa o a través de la concreción de convenios interinstitucionales con otros órganos de la administración pública, así como con las comunidades organizadas.

En este decreto se califica de urgente realización de la ejecución de la obra.

En el renglón de los considerandos contenidos en este decreto se especifica lo siguiente:

El teatro Junín se construyó en los años 50, en las cercanías de la urbanización El Silencio. Fue considerado como uno de los cines más lujosos y contribuyó al esparcimiento y entretenimiento de los venezolanos durante esa época.

Hoy en día se encuentra en estado de abandono, por lo que requiere el rescate de ese patrimonio arquitectónico y cultural.

El Estado tiene la obligación de preservar los bienes que integran el patrimonio cultural de la República y es por ello que se requiere ordenar la adquisición de los inmuebles ubicados en dicha edificación.

Asimismo, es deber del Estado velar por la preservación, defensa y salvaguarda de las obras, conjuntos y lugares creados por el hombre que constituyen elementos fundamentales de las identidades éticas y culturales nacionales.

Cada uno de los bienes tangibles o intangibles reflejados en los Catálogos del Patrimonio Cultural Venezolano, inscritos en el registro General del Patrimonio Cultural que han sido seleccionados por las comunidades en el país y validados por el Instituto del Patrimonio Cultural constituyen manifestaciones culturales representativas de identidad y diversidad cultural de Venezuela.