Eduardo Galeano siempre fue ferviente creyente del periodismo combativo

Eduardo Hugues Galeano nació el tres de septiembre del año 1940 en Montevideo, Uruguay. Escritor y periodista realizó una obra que indaga en las raíces y en los mecanismos sociales y políticos de Hispanoamérica.

En 1960 inició su carrera periodística como editor de la que sería la revista Marcha. Tras el golpe de Estado de 1973 fue encarcelado y tuvo que exiliarse a Argentina. En Argentina fundó la revista cultural Crisis.

En 1976 fue añadido a la lista de los condenados del escuadrón de la muerte de Videla por lo que tuvo que marcharse de nuevo, esta vez a España, donde escribió la trilogía Memoria del fuego (un repaso por la historia de Latinoamérica). Regresó a Montevideo en 1985. Con otros escritores, como Mario Benedetti, y periodistas de Marcha, fundóel semanario Brecha.

Fue investido Doctor Honoris Causa por las universidades de La Habana, de El Salvador, Veracruzana de México, Nacional de Córdoba en Argentina, de Buenos Aires y de Guadalajara, México.

Las obras de Eduardo Galeano llaman a establecer un frente común contra la pobreza, la miseria moral y material. Sus trabajos trascienden géneros ortodoxos y combina documental, ficción, periodismo, análisis político e historia.

Eduardo Galeano abarca los más diversos géneros narrativos y periodísticos. Entre su deben destacar: Los días siguientes (1962), China, crónica de un desafío (1964), Los fantasmas de día de León (1967), Guatemala, país ocupado (1967), Nosotros decimos no (1989), El libro de los abrazos (1989), Las palabras andantes (1993), El fútbol a sol y sombra (1995), Las aventuras de los jóvenes dioses (1998), Patas arriba. La escuela del mundo al revés (1999), Bocas del tiempo (2004) y Espejos. Una historia casi universal (2008).

CERO IMPARCIAL

Galeano huye explícitamente de la imparcialidad; no busca la construcción de un discurso en el que los hechos y las gentes queden igualados por una mirada presuntamente objetiva. Su pretensión, y su logro, es reflejar el drama de América, el juego del poder; la lucha de los oprimidos en pos de su emancipación; la creación de un arte y una literatura genuinos, más allá del mimetismo colonial; las transformaciones sociales y económicas; la evolución de las relaciones interamericanas y con el exterior.

El punto de vista es abiertamente partidista, rechaza todo aquello que ha instalado a América Latina en una subordinación que se pretende inevitable y la brutal explotación y el aniquilamiento a que han sido sometidos los pobres de todo el continente, incluyendo a los marginados del Norte poderoso y opulento, sean indios, negros, chinos o chicanos.

En abril de 2009, el presidente venezolano Hugo Chávez entregó un ejemplar de Las venas abiertas de América Latina al presidente estadounidense Obama durante la quinta cumbre de las Américas, celebrada en Puerto España, Trinidad y Tobago.

El texto es un ensayo muy relevante en la vida de Galeano, que propone una relectura del continente marcando un antes y un después en la manera de entender este hemisferio. Cuenta en esta obra, traducida hasta la fecha a más de una veintena de idiomas, la historia económica de Latinoamérica no desde la visión de los vencedores sino desde la mirada de los vencidos, y explica cómo los imperios en complicidad con las élites regionales y el alto clero, han extraído la riqueza de nuestro suelo latinoamericano a cambio de baratijas y a costa de todo.

Eduardo Galeano mereció la medalla de oro del Círculo de Bellas Artes de Madrid y la medalla de la Independencia de la Ciudad de México. Falleció el 13 de abril de 2015 a los 74 años en Montevideo, a causa de un cáncer de pulmón que padecía desde 2007. |

T/ Redacción CO
F/ Archivo
Caracas