La marcha del 11 de abril de 2002 arraigó en el pueblo venezolano espíritu de lucha y resistencia por la continuidad de un país democrático, afirmó este miércoles la ministra del Poder Popular para la Mujer e Igualdad de Género, Blanca Eekhout.
«Esa marcha también fue víctima de la violencia imperial porque para justificar el golpe de Estado había que matar gente», refirió la ministra desde la sede del Banco de la Mujer, en Caracas, al tiempo que destacó el coraje del pueblo que resistió al lado del presidente Hugo Chávez a pesar de todos los caídos en Puente Llaguno cuando se consumó un golpe de Estado.
Durante la entrega de la orden Heroínas Venezolanas a nueve mujeres víctimas de los hechos violentos suscitados hace 16 años, la ministra destacó que esa misma lucha que imperó en el pueblo para que el 13 de abril se restituyera el orden constitucional, es la misma que hoy se vive en defensa del presidente Nicolás Maduro.
«Esta orden es destinada a honrar a mujeres que se hayan destacado en la promoción, en la defensa de derechos humanos y su contribución significativa al logro de las justicias. Por sus méritos en las reivindicaciones sociales, en las luchas comunitarias, así como también por los servicios prestados al progreso de la humanidad», indicó Eekhout.
La titular de este despacho ministerial agregó que la gesta del pueblo venezolano el 11,12 y 13 de abril «ha sido una contribución a la humanidad, para que haya esperanza de que otro mundo es posible a través de nuestra Revolución».
TyF/AVN