Un tribunal egipcio condenó a muerte a 14 insurgentes y a 6 otros a cadena perpetua por los ataques que lanzaron el pasado año contra las fuerzas del Ejército y la policía en la península del Sinaí.
Los hombres fueron acusados el lunes en la corte Ismailiya por matar a tres policías, un oficial del Ejército y un civil durante ataques de junio y julio de 2011.
Por su parte, los acusados responsabilizaron al presidente egipcio, Mohamad Mursi, por la decisión judicial.
“Mursi es un desleal y aquellos que lo siguen son desleales”, dijo uno de los acusados.
El 5 de agosto, en el transcurso de un enfrentamiento entre los militantes y soldados egipcios en el Sinaí, estos primeros mataron por lo menos a 16 guardias fronterizos y dejaron varios heridos.
Tras la revolución de 2011 que resultó en el derrocamiento del dictador Hosni Mubarak, Egipto subrayó en la necesidad de asegurar sus fronteras.
Los ataques de militantes en la región del Sinaí han llevado al gobierno de El Cairo a desplegar cientos de soldados en esta región para prevenir más violencias en el futuro.