Para estabilizar el servicio de agua potable a los habitantes del municipio Valera, en el estado Trujillo, este viernes se realizan trabajos de limpieza del dique toma que opera en esta localidad, que se encuentra con sedimento, maleza y troncos de árboles que fueron arrastrados tras la crecida del río Motatán, afluente que surte a este sistema, luego de las lluvias de los últimos días en las zonas altas.
El gerente estadal de la Hidrológica de las Cordillera Andina (Hidroandes), Richard Pereira, informó este viernes que aun con esta situación presentada en el dique toma, la planta potabilizadora Valera ha mantenido su normal funcionamiento y los habitantes de esta jurisdicción no se han visto afectados por la interrupción del servicio.
En cuanto a la situación del municipio San Rafael de Carvajal, dijo que el servicio fue interrumpido para reparar un equipo, falla que fue solventada y ha permitido que la situación se normalice.
En otro particular, indicó que en el municipio Boconó, en la zona sureste de la entidad, las lluvias han afectado la planta y el servicio ha tenido varias interrupciones.
En cuanto al municipio Trujillo, capital del estado, destacó que el suministro se ha incrementado de 139 litros por segundo a 210 por segundo, lo que ha permitido mejorar el servicio que se vio afectado por la sequía del río Castán, que surte a esta población.
«Estamos trabajando con la comunidad para garantizar el servicio de agua en el estado», precisó el gerente de Hidroandes.