Mediante una operación todavía desconocida, el Ejército colombiano rescató este domingo al general Luis Mendieta y al coronel policial Enrique Murillo, quienes fueron retenidos por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en el año 1998, tal como anunció el presidente de Colombia, Álvaro Uribe, durante un consejo comunitario en el Choco (oeste).
El rescate se produjo a través de una operación militar y policial que logró adentrase en un campamento del grupo insurgente, el cual se localiza en las selvas del Guaviare, ubicado al sur de la nación neogranadina.
Mendieta, era uno de los efectivos militares que estaba en manos de las fuerzas subversivas y que, además, integraba el grupo de la operación de canje humanitario. También era el general con mayor rango que se encontraba retenido por el grupo guerrillero y tenía el grado de comandante en la Policía de Mitu (Vaupés).
«Ya ambos están en poder de nuestras fuerzas armadas, que están combatiendo en las selvas del (departamento) del Guaviare», aseveró el Primer Mandatario neogranadino sin ofrecer detalles del operativo que permitió la liberación de los dos ciudadanos.
Información reseñada por Telsur, detalló que la familia del general había sido previamente informada, puesto que una de las hijas del recluido se enteró de la noticia producto de una llamada telefónica.
‘‘La familia del general Mendieta ya fue informada (…), según declaraciones de Yeni (hija de Mendieta) estaba a diez minutos de la finca de la familia cuando un persona la llamó y le contó que su papá estaba libre», informó el corresponsal.
Para el mes de agosto de 2009, las FARC entregó una prueba de vida donde el general Mendieta enviaba un mensaje a su familia y también reconociendo el trabajo humanitario de la senadora y militante del Partido Liberal, Piedad Córdoba, por haber conseguido las liberaciones de las ciudadanas y los ciudadanos en manos del grupo guerrillero.