Combates en la ciudad meridional de Zinyibar culminaron con «decenas de miembros de Al Qaeda» fallecidos, de acuerdo con un parte militar yemenita emitido en Sana’a, la capital.
La información se produce durante el anunciado retorno al país del presidente Alí Abdula Saleh, convaleciente de las lesiones sufridas en un ataque artillero contra el complejo gubernamental en Sana’a, la capital.
En los dos últimos días miembros de tribus del sur y unidades del ejército combatieron con miembros de Al Qaeda, decenas de los cuales murieron, incluido uno de sus dirigentes, Abu Sonbol, señala el parte castrense difundido por la agencia noticiosa oficial yemenita SABA.
Los medios oficiales afirman que en los recientes choques armados han muertos 200 miembros de Al Qaeda y dos soldados.
El fin de semana pasado fuentes militares dieron cuenta de un ataque aéreo estadounidense contra lo que describieron como cuarteles de Al Qaeda, acorde con un acuerdo con Washington para combatir el terrorismo.
Mientras, la situación política en este país del golfo de Adén sigue crispada debido al posible reinicio de las protestas populares que exigen la renuncia inmediata del presidente Saleh.
El mandatario asegura que sólo abandonará el poder como resultado de una transición pacífica, a pesar de las multitudinarias protestas en su contra y presiones internacionales.
En principio, las autoridades yemenitas describieron las protestas sociales como hechura de la comunidad musulmana chiíta del país, pero participantes de la escuela de pensamiento sunita firmaron varios comunicados haciéndose eco de la demanda de reformas políticas y el fin de la era Saleh, que dura más de tres décadas.