Bolivia decidió retirarse de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América — Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) y cesar a 80% de los embajadores que había designado Evo Morales, según dijo a medios locales la canciller de facto, Karen Longaric.
La canciller de facto hizo estas declaraciones luego de que Pary afirmó desde Nicaragua que seguiría ejerciendo como ministro de Relaciones Exteriores de Bolivia y participara de una reunión del Consejo Político del ALBA.
Los resultados de los comicios presidenciales del 20 de octubre en Bolivia desencadenaron una oleada de protestas contra la reelección de Evo Morales, acusado por la oposición de fraude electoral aunque no presentaron pruebas que lo demostrara.
Ante las violentas protestas y las «recomendaciones» de la policía y las Fuerzas Armadas, el 10 de noviembre Morales dimitió. Posteriormente Morales acusó a los mandos militares de apoyar un golpe de Estado contra su gobierno.