El Kiosco de Earle: ¿Alejandra vivirá?

Maura Venegas, mi cuñada,
76 años, se vino de Valera
a operarse de unas cataratas.
El sádico vía crucis de exámenes
duró 6 meses. Al fin la operaron, re-
gresó a su pueblo, miró el sol un mes
y murió, agobiada. Alejandra, mi otra
cuñada, va por el mismo
camino. Pasó trajinando cuatro
meses para que la operen por
complicación de una vieja cirugía
umbilical. En el hospital Vargas
le pidieron exámenes tras
exámenes y cuando se los hacía,
le ordenaban otros. Al fin le
exigieron un kit de cosas infinitas
para operarla y cuando lo consiguió,
no la operaron. Le dije que no fuera
más al Vargas y toqué otras puertas.
La repuesta, cuando llamo,
siempre es la misma: “ya averiguo”.
Me quiero morir con Alejandra.

Earle Herrera
earlejh@hotmail.com
Caracas