El kiosco de Earle: Autobloqueo

El bloqueo es un crimen, pero el autobloqueo es una aberración, cuya etapa superior
es el autosuicidio (esto último es un hallazgo neuro-lingüístico de Carlos Andrés Pérez).
La derecha venezolana se autobloqueó desde que vio caer del cielo a un comandante de paracaidistas.
En su primera etapa, el autobloqueo es mental y los afectados ven una realidad paralela.
La segunda fase es política y provoca desvaríos que los lleva a postrarse ante una reina (Irene)
o a sacarle las garrapatas a un caballo pequeño burgués (Frijolito).
La última etapa empicha las neuronas y al autobloqueado le da por autoproclamarse cualquier
vaina: presidente, nudista, anacoreta.
En este punto, no hay nada que hacer: el sujeto es irrecuperable. Déjenselo
a Pompeo o al sociópata mayor.

earlejh@hotmail.com
Caracas