El kiosco de Earle: Chávez les hace falta

Aunque no la fecundaba porque ello es imposible en las mentes estériles,
Chávez estimulaba a la oposición, no para alumbrar ideas, pero sí para copiárselas.
Gracias al comandante, perpetraron libros, películas, artículos y ganaron buen dinero.
El nombre de sus programas lo tomaban de expresiones del líder bolivariano:
“Aló ciudadano”, “La Bicha”, “Plomo Parejo”, etc.
El Universal contrató a un semiólogo ibérico, quien concluyó que “Chávez, con su idiolecto
(su particular forma de decir las cosas, su lenguaje, su léxico), nos robó nuestra libertad”.
Parece una hipérbole pero uno no sabe.
Lo cierto es que la derecha no tiene hoy de quién copiarse y a cada
rato exhibe su oquedad.

earlejh@hotmail.com
Caracas