El Kiosco de Earle: Diarios y pájaros

Pertenezco a la cultura del periódico en la mesa con el desayuno.
Seguí en eso después de la llegada de internet. Cada día me disparaba unos cuatro diarios, aunque al final sintiera un gran vacío.
Era un vicio y leer El Nacional, una adicción.
Desde que dejé de hacerlo por su precio y descomposición cualitativa,
se me quitó sin darme cuenta la migraña, no tomé más las pastillas para el insomnio ni relajantes musculares.
Con el alba, he vuelto a escuchar el canto de los pájaros.

earlejh@hotmail.com
Caracas