El Kiosco de Earle: El calderón del diablo

La destitución de Calderón Berti es macondiana. O sea, el autoproclamado cree de verdad que es presidente de algo. Lo peor es que el destituido también creía ser diplomático en serio y se siente humillado por ser echado de una embajada ficticia. Pompeo no cree que así salgan de Maduro. “Esto es kafkiano, uón”, mandibuleó una sifrina naranja. “A mí me parece surrealista, uón”, masticó un millennial amarillo pollito. A última hora informan que Calderón conspiraba para derrocar al autoproclamado, instalar un gobierno de transición y llamar a elecciones libres, sin pasar por el cese de la usurpación. El diputado
Burundanga sapeó el golpe alucinante y cobró.

Earle Herrera
earlejh@hotmail.com
Caracas