El kiosco de Earle: El sparring

El candidato Maduro subió al ring electoral esperando enfrentar al mejor contendiente de la derecha,
dicho en términos boxísticos, al mejor pugilista libra por libra,
a un peso pesado de la política, pero le mandaron a un Falcón
que no esperó el último round para tirar la toalla.
Con los primeros jabs, se lanzó al piso.
Lo más patético fue que desde la lona, chillaba querer otra pelea para octubre.
Maduro esperaba a un campeón y le mandaron un sparring,
o peor, un paquete.

earlejh@hotmail.com
Caracas