Tras su reelección|Emigrantes hondureños exigen a Obama un trato digno

Muchas voces claman actualmente  un tratamiento digno a los emigrantes hondureños en Estados Unidos y el cese a las deportaciones.

Unos 250 mil hombres y mujeres de esta nación votaron por Barack Obama, de más de 800 mil que viven en el país norteño, la mayoría sin permiso temporal de trabajo y esperan, junto a más de 11 millones de latinoamericanos, por una reforma migratoria prometida por el reelecto ocupante de la Casa Blanca.

De enero a la fecha más de 24 mil hondureños fueron deportados de aquel país y al final de diciembre serán 32 mil, acorde con sor Valdette Willeman, encargada del Centro de Atención del Migrante Retornado.

Para Willeman, el presidente Barack Obama debe ser consecuente con sus promesas y más ahora tras el respaldo total de los latinos para su reelección.

Por los emigrantes hondureños que van a ese país buscando mejores condiciones de vida Obama nada hizo, jamás frenó las deportaciones, dijo la defensora de los derechos humanos.

En los registros en poder de Willeman, uno de cada 100 de los deportados dejó en Estados Unidos familia, negocios y una expectativa de vida que no encuentra en Honduras, pese a los rigores de la vida de un emigrante en aquel país.

La directora del Centro lamentó la ausencia de una agenda gubernamental en su país que evalúe el tema de los desaparecidos, el binomio familia-pobreza, y todos aquellos que hacen crezcan la migración, desde la perspectiva de un problema social.

Los estimados nacionales más generosos evidencian que unos 850 mil hondureños residen en el exterior, casi el 12 por ciento del total de la población.

La inmensa mayoría, unos 800 mil, vive en Estados Unidos, cifra que incluye no solo a los emigrados, sino a sus descendientes de segunda y tercera generación, hijos y nietos.

Además del tema migratorio, algunas opiniones aquí están divididas sobre el significado favorable para el país centroamericano de una permanencia del mandatario norteamericano en el poder, y fueron el necesario apoyo a la lucha contra el narcotráfico y la seguridad regional, los puntos de mayor coincidencia.

Honduras sufre las consecuencias de ser camino trillado de la droga en viaje hacia Estados Unidos, primer consumidor del estupefaciente del planeta.

Fuente/PL