Un posible bloqueo naval contra la República Bolivariana de Venezuela, que podría derivarse de la reciente firma de convenios militares entre el almirante estadounidense, Craig Faller, y el presidente de la República Federativa de Brasil, Jair Bosonaro; la aplicación de «sanciones más fuertes» contra Caracas, solicitadas a la Administración Trump por el diputado a la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, y por el presidente de Colombia, Iván Duque; y la realización de talleres en la sede de la OEA, en Washington, para determinar como podrían aplicarse nuevas medidas coercitivas unilaterales, son algunas de las recientes amenazas injerencistas del Comando Sur y los Gobiernos del Grupo del Lima, denunciadas este lunes por el canciller venezolano, Jorge Arreaza, ante el cuerpo diplomático acreditado en nuestro país.
Durante una rueda de prensa, el ministro del Poder Popular para las Relaciones Exteriores también señaló que los 650 kilogramos explosivos que fueron incautados por la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) en la frontera con Colombia, seguramente son muy parecidos a los que fueron utilizados para destruir la maquinaria del Consejo Nacional Electoral (CNE) que se encontraban dentro de un galpón en el sector Filas de Mariche, en el estado Miranda, de cara a las Elecciones Parlamentarias de Venezuela 2020.
«Queremos transmitir a la comunidad nacional e internacional la nueva fase de las agresiones. Se ha desatado una táctica dentro del plan del imperialismo contra Venezuela, que los medios masivos internacionales le restan importancia», expresó el diplomático del país suramericano desde la Casa Amarilla Antonio José de Sucre, sede protocolar del Ministerio para Relaciones Exteriores.
Reiteró que la amenaza de un bloqueo naval contra Venezuela constituye una declaración de guerra violatoria del Derecho Internacional y de los preceptos consagrados en la Carta de las Naciones Unidas.
«Se habla nuevamente de un bloqueo naval contra Venezuela, se plantea en la Oficina Oval, en el departamento de Defensa. Es la nueva vigencia de la Doctrina Monroe, anacrónica, caduca de 1823», agregó.
Finalmente, el canciller de la República Bolivriana de Venezuela afirmó que los voceros de la Revolución Bolivariana darán la batalla por las ideas en la Corte Penal Internacional, así como en el seno de la ONU y otras instituciones internacionales, para impedir que se concreten estas amenazas contra el pueblo venezolano, que vulneran los derechos socio-económicos, así como el acceso a la alimentación y la salud.
«Sabremos responder y daremos mil batallas hasta garantizar la victoria. Por eso vamos a Naciones Unidas, para que la comunidad internacional pueda neutralizar estos ataques contra el pueblo de Venezuela», puntualizó.