Si una palabra pudiera describir lo que siente Walter Ramiro Castillo Sandino por su abuelo, Augusto César Sandino, esa sería orgullo. Porque Castillo Sandino se enfrentó a la leyenda de la derecha que quiso denostar del héroe nicaragüense, y siempre tuvo entre ceja y ceja que el papá de su mamá fue un revolucionario de carta cabal, querido en su país y en América Latina, odiado por Estados Unidos.
Eso también lo sabía el comandante Hugo Chávez, admirador de Sandino, comprometido con la construcción de la patria grande del Libertador Simón Bolívar. Lo cierto es que Castillo Sandino logró editar, en 2009, El libro de Sandino. El bandolerismo de Sandino en Nicaragua, texto que fue prologado por Chávez y presentado en la tierra del General de Hombres Libres. Y ahora busca hacer la presentación formal en Venezuela.
Castillo Sandino -de visita en Caracas gracias al empeño del partido Nuevo Camino Revolucionario y a su dirigente en la capital del país, Alí Díaz, además de Rafael Paniagua- espera que el bautizo del libro logre concretarse antes de su partida.
“Vengo en nombre de nuestra familia”, sostiene. “Yo no me represento a mí mismo: represento a la familia y a la vida y obra de Sandino”, sentencia.
QUINIENTAS PÁGINAS DE HISTORIA Y DE AMOR
Sobre la elaboración del texto de 500 páginas, Castillo Sandino relató que se nutrió de muchos materiales, documentos y objetos que le entregaron en su país. Le dijeron que debía escribir todo lo que sabía, y así lo hizo, aunque aclara que no es periodista ni escritor, sino ingeniero graduado en la antigua Unión Soviética. También le insistieron en que el comandante Chávez debía escribir el prólogo, y así fue.
Castillo Sandino aprovechó el viaje de Chávez a Nicaragua, en el contexto del golpe de Estado (2009) contra el mandatario de Honduras, Manuel Zelaya, para hacerle la solicitud. El Comandante le respondió que, para él, eso era una orden, “y en menos de un mes mandó a un oficial” a Managua con el documento original.
Tiene una colección de anécdotas de Chávez. Entre otras, la similitud de disfrutar de un abuelo (Sandino) y un bisabuelo (Maisanta) que fueron descalificados por las oligarquías de sus países pero amados por sus pueblos.
IMPRIMIR DE NUEVO
El libro fue editado en Nicaragua (2 mil ejemplares) y presentado en ese país en 2009. También ha sido expuesto en otras naciones. En él “hay un Sandino de carne y hueso, como todos nosotros, con más virtudes que defectos”. Es, sostiene, el texto más completo sobre el revolucionario que se haya hecho en el mundo. El próximo, ya en proceso de elaboración, se llamará El incendio de las segovias nicaragüenses, estará listo en unos seis meses y recogerá algunos elementos controversiales, como el escaso apoyo que recibió Sandino en México. “Pero yo no puedo publicar la segunda obra si esta (la primera) no ha sido difundida correctamente”, insistió.
Decidido a honrar la memoria de su abuelo como corresponde, también proyecta una revista (que podría publicarse trimestralmente) de la que ya está listo el primer número, con las pruebas de quienes asesinaron a Sandino. Igualmente quiere construir un museo y buscar seriamente los restos del revolucionario, de los que se desconoce su paradero.