La epidemia de cólera, que se cobró más de siete mil vidas en 2011 en Haití, persiste a dos años del peor terremoto en la historia del país, donde más de 700 mil personas sobreviven en campamentos en precarias condiciones.
Las tareas de reconstrucción avanzan lentamente y en algunas zonas aún se espera la remoción de escombros que dejó el sismo de 7 grados en la escala de Richter del 12 de enero de 2010.
«La población continúa con graves problemas socio-sanitarios. En materia de salud, la epidemia de cólera sigue siendo el primer desafío», dijo a ANSA Gonzalo Basile, presidente de la ONG Médicos del Mundo Argentina.
Más de 300 mil muertos, 300 mil heridos y 500 mil desplazados fue el saldo de aquel sismo. Pero esas cifras no parecen ser definitivas. Aún hoy, miles de familias haitianas viven en campamentos provisorios en condiciones de hacinamiento, con carencias en acceso a agua potable, saneamiento básico y tratamiento de basura, de acuerdo con un reciente reporte de la entidad.
Actualmente se registra un promedio de 300 casos de cólera por día en todo el país, revela un informe de la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Los casos de cólera notificados son 522.233, de los cuales 279.077 (54%) fueron hospitalizados y 7.001 personas fallecieron, según datos de la OPS.