La epidemia de dengue en Panamá se agudiza y los fallecidos llegaron hoy a 11 debido a que el combate contra el mosquito Aedes aegypti ha sido menos efectivo de lo que las autoridades sanitarias esperaban.
El Ministerio de Salud (Minsa) se queja de que la población no está contribuyendo a la campaña de erradicación del vector y la fumigación es insuficiente, mientras que la deficiencia en la recogida de basura contribuye también a la creación de focos.
Según el Minsa, aunque la tarea de erradicación en teoría sencilla porque solo implica eliminar los criaderos, que en muchas ocasiones son envases depositados en lugares inadecuados, se ha tornado complicada por la apatía, las malas costumbres y la ineficacia del aseo estatal.
La población evade pagar las multas que se les impone por tener criaderos en sus casas, las cuales llegan hasta los 500 dólares, pero ante su ineficacia el ministro de Salud, Javier Díaz, piensa que es necesario crear otro instrumento de penalización más fuerte.
El fallecimiento de un anciano de 93 años en San Francisco, un corregimiento de alto nivel social, preocupa por la gran cantidad de criaderos en las casas con larvas en bandejas de neveras y aires acondicionados, escurridores de platos, canales de los techos, piscinas, adornos al aire libre y juegos de plástico de edificios.
Las autoridades de Salud informaron que Juan Díaz, San Francisco, Tocumen, Mañanitas y Pueblo Nuevo son los corregimientos con más casos de dengue en el distrito capital, y en el país se han reportado mil 12, con 11 defunciones, seis de ellas en estos primeros días de 2014.
Increíblemente, la gente está más preocupada porque el Minsa le suspenda los carnavales que por los altos índices de infestación del mosquito y las autoridades tuvieron que recular y permitir que Momo celebre su gran festín.