Un triunfo que sigue retumbando |Esgrima cosecha el oro olímpico de Limardo

El eco del oro olímpico de Rubén Limardo no deja de retumbar en el país. Hace exactamente tres años, el 1° de agosto de 2012 el guayanés ganó en Londres la segunda presea dorada en la historia olímpica de Venezuela, y sacó a la esgrima del anonimato para convertirla en un deporte, cuyo número de practicantes creció por el impulso de aquel triunfo.

“Esa medalla de Rubén produjo un cambio radical en la esgrima y en la manera de pensar del atleta de alto rendimiento”, asegura Mariana González, máxima figura del florete venezolano, quien tras el retiro fue electa presidenta de Feveesgrima.

De acuerdo a la doble medallista de oro en florete individual en Juegos Panamericanos, el triunfo de Limardo ha generado “un auge en las categorías menores. «Cada vez hay más niños que se acercan a las salas de armas y a las escuelas de iniciación, porque quieren ser como el campeón Rubén”.

Aunque desde los años noventa, la esgrima comenzó a florecer a través de la creación de las fundaciones e institutos regionales de deportes, que construyeron nuevas salas de armas en estados como Carabobo, Bolívar, Lara y Mérida, su práctica se limitaba a una minoría que llegaba al deporte por influencia familiar.

“Nosotros veníamos de allí, pero los nuevos esgrimistas llegan de las escuelas de iniciación deportiva o de comunidades muy humildes, donde el deporte ha cobrado un nuevo impulso, con el apoyo de iniciativas como las del ministro de Energía Eléctrica, Jesse Chacón”, recalca González.

Renny Rivero, presidente de la Asociación de Esgrima de Distrito Capital, ha visto cómo la esgrima crece en la ciudad.

“En Caracas ha habido un incremento del cien por ciento”, afirma. “Los niños ven en Limardo una inspiración y hemos aprovechado para crear nuevos centros de iniciación, gratuitos, en los colegios Gran Colombia y Armando Reverón, en Santa Rosalía, donde tenemos cerca de 200 talentos”.

Con el apoyo del ministro Chacón, la sala de armas de la UCV fue remodelada, con una inversión de 20 millones, y en el reciente IV Campeonato Infantil de Esgrima, las asociaciones de todo el país recibieron pistas, uniformes, armas y equipos electrónicos para seguir masificando el deporte.

González señala que es necesario dar otro paso adelante. “Necesitamos fabricar los materiales de competencia en el país” y Rivero da otro toque: “Estabilidad económica para los entrenadores es esencial”.

T / Líder