La oficina estadística de la Comisión Europea (Eurostat) informó este miércoles que en septiembre el desempleo en la zona euro llegó a 11,6%, una décima más que el mes anterior, un máximo histórico impulsado por el paro en España que llegó al 25,8%.
Según precisó la Eurostat, en total 25,7 millones de europeos carecían de trabajo en el mes anterior, de los cuales 18,4 millones se encontraban en los países de la zona del euro, 2,17 millones más que en el mismo mes de 2011.
La crisis de deuda europea, que inició en Grecia en 2010 y se extendió a Irlanda, Portugal, Chipre y España, ha devastado la confianza empresarial y con ella la creación de puestos de trabajo.
El mayor número de desocupados se encuentra en España, donde la tasa de desempleo aumentó tres décimas en septiembre respecto al mes anterior y alcanzó el 25,8 por ciento.
Entre los españoles menores de 25 años, el desempleo aumentó a 54,2 por ciento desde un 53,8 por ciento.
Pese a la situación, el jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, afirmó que “en estos momento no es imprescindible para España solicitar un rescate financiero a la zona euro”. De igual forma, fuentes del Ministerio de Economía, aseguraron que el país cuenta con fondos suficientes para financiarse este año.
La administración de Rajoy se comprometió con la Unión Europea (UE) a reducir su enorme déficit público, con la meta de alcanzar un 6,3 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) este año, 4,5 por ciento en 2013 y 2,8 por ciento en 2014.
Para cumplir esos objetivos, el Gobierno español plantea un programa de ajuste económico que supone un recorte de 150 mil millones de euros entre 2012 y 2014 (194 mil millones de dólares).
El plan incluye aumento de impuestos, entre ellos el Impuesto al Valor Agregado (IVA), recortes salariales entre los funcionarios, una reducción de las prestaciones a los desempleados y reducciones presupuestarias en sectores como la sanidad y la educación.
De acuerdo con la oficina estadística de la Comisión Europea el segundo país con mayor desempleo es Grecia con una desocupación que afecta al 25,1 por ciento de su población económicamente activa. En tercer lugar destaca Portugal con 15,7 por ciento.
Austria registró el menor nivel de paro, 4,4 por ciento, seguida de Luxemburgo con 5,2 por ciento y de Alemania y Holanda con 5,4 por ciento en ambos casos.