El Estado venezolano adelanta el relanzamiento de la producción de derivados sanguíneos hechos por un equipo de profesionales que laboran en la empresa Quimbiotec y que son los encargados de cumplir un proceso arduo para obtener productos terapéuticos, dirigidos a atender la demanda de miles de pacientes en todo el país.
Así lo informó este miércoles la presidenta de Quimbiotec, Evelyn Rodríguez, durante un recorrido por la Planta Productora de Derivados Sanguíneos, ubicada en las instalaciones del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (Ivic), en San Antonio de los Altos, estado Miranda.
Indicó que en el lugar se producen seis tipos de tratamientos: la Albúmina Humana (necesaria para la reconstrucción de tejidos, como es el caso de pacientes que sufren quemaduras y las consecuencias de la quimioterapia); la Inmunoglobulina G (cuya función es proteger los tejidos de ataques de virus, bacterias, como por ejemplo el Síndrome de Guillain-Barré).
También se produce la Inmunoglobulina Anti-D (que se aplica dentro de las 72 horas después del parto y reduce el riesgo de aloinmunización anti-RhD en las mujeres Rh negativas que dieron a luz a un neonato Rh positivo); la Inmunoglobulina Anti-Tetanica (dirigida a la inmunización contra el tétanos); la Inmunoglobulina Antihepatitis B (para la prevención de la Hepatitis B); y el Factor VIII Plasmático (tratamiento para pacientes hemofílicos).
Una vez que estos seis tratamientos son producidos en Quimbiotec pasan al Instituto Nacional de Higiene Rafael Rangel, donde se realiza el seguimiento de farmacovigilancia y se autoriza su distribución a la red pública nacional de salud.
Estos hemoderivados van directamente a las farmacias de hospitales y del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS), donde son aplicados de manera gratuita a pacientes que lo requieran, tras diagnóstico médico.
Rodríguez explicó que la principal materia prima para obtener estos seis tratamientos depende de la donación del plasma, por lo que invitó al pueblo venezolano a sumarse a la donación, acción altruista que es necesaria para salvar vidas.
En Latinoamérica solamente funcionan tres plantas productoras de derivados sanguíneos de este tipo. Una en Cuba, otra en Argentina y la otra en Venezuela. Mientras que, en el mundo hay alrededor de 45.