La medida fue dictada por la Oficina de Control de Activos Extranjeros|Estados Unidos congela activos de figuras principales del cártel de Sinaloa

Estados Unidos anunció el 9 de mayo que, de conformidad con la Ley de Designación de Cabecillas Extranjeros del Narcotráfico, ha designado a cuatro operativos claves del cártel de la droga de Sinaloa y congelado sus activos en Estados Unidos.

La medida de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, incluye a dos hijos del cabecilla de la droga de Sinaloa, Joaquín «El Chapo» Guzmán Loera. Prohíbe a ciudadanos estadounidenses realizar transacciones financieras o comerciales con cuatro individuos y congela cualquier activo que éstos puedan tener bajo la jurisdicción de Estados Unidos.

«La OFAC se centrará enérgicamente en aquellos individuos que faciliten las operaciones de narcotráfico del Chapo Guzmán, inclusive a miembros de la familia», dijo el director Adam J. Szubin, según informa un comunicado de prensa del Departamento de Hacienda. «Con el Gobierno de México, estamos firmes en nuestra determinación de desmantelar la organización de tráfico de drogas del Chapo Guzmán”.

La OFAC designa a Iván Archivaldo Guzmán Salazar y Ovidio Guzmán López por su participación en la organización de narcotráfico de su padre y el cártel de Sinaloa. En 2005, las autoridades mexicanas arrestaron a Iván Archivaldo Guzmán Salazar, acusado de lavado de dinero, pero posteriormente fue puesto en libertad.

Ovidio Guzmán López también juega un papel importante en las actividades de narcotráfico de su padre. Noel Salgueiro Nevarez es el jefe del cártel de Sinaloa en el estado mexicano de Chihuahua, donde una guerra sangrienta ha cobrado las vidas de miles de personas. Las autoridades mexicanas lo arrestaron en octubre de 2011, y sigue bajo custodia en México.

Ovidio Limón Sánchez, que también se encuentran actualmente bajo custodia de México, es un operativo importante del cártel de Sinaloa en el estado de Sinaloa. Fue detenido en noviembre de 2011 por las autoridades mexicanas. Además, en 2009, un jurado en la Corte de Distrito de Estados Unidos del Distrito Central de California, lo acusó de múltiples cargos de tráfico de drogas.

Joaquín Guzmán Loera y el cártel de Sinaloa fueron identificados previamente por el presidente como narcotraficantes extranjeros importantes de conformidad con la Ley de Cabecillas, en 2001 y 2009, respectivamente.

La medida del Departamento del Tesoro no habría sido posible sin el apoyo de la Agencia de Estados Unidos para el control de la Droga (DEA).

«Para eliminar a las organizaciones como el cártel de Sinaloa, tenemos que seguir utilizando todas las herramientas disponibles para asegurar que estos grupos criminales y sus asociados no puedan explotar el sistema financiero de Estados Unidos”, dijo el Jefe de Operaciones Financieras de la DEA John Arvanitis.

«La DEA ataca como nunca antes y a todo nivel al cártel de Sinaloa y otras organizaciones para eliminarlas y llevar a sus líderes ante la justicia”.

A nivel internacional, la OFAC ha designado a más de 1.000 empresas y personas vinculadas con 94 cabecillas de la droga desde junio de 2000. Las sanciones por violaciones de la Ley de Cabecillas incluyen desde sanciones civiles de hasta 1,075 millones de dólares por cada violación hasta condenas criminales más severas.

Las sanciones penales a funcionarios corporativos pueden incluir hasta 30 años de prisión y multas de hasta 5 millones de dólares. Las multas a las empresas pueden alcanzar los 10 millones de dólares. Otros individuos podrían enfrentar hasta 10 años de prisión y multas de conformidad con lo que estipula el Título 18 del Código de Estados Unidos por violaciones a la Ley de Cabecillas Extranjeros del Narcotráfico.

Fuente/ANDES