Según documentos revelados por Wikileaks|Estados Unidos pedía cuentas a España sobre su relación comercial con Venezuela

De acuerdo con cables publicados recientemente por el portal Wikileaks,  Estados Unidos envió en 2005 al secretario de Defensa, Francisco Pardo, a conversar con el encargado de negocios de Estados Unidos en Madrid, Robert Manzanares, para rendir cuentas sobre la venta de barcos patrulleros a Venezuela.

«El Gobierno de (José Luis Rodríguez) Zapatero y el Ministerio de Defensa querían ser tan claros como fuese posible con los Estados Unidos en lo que respecta a las ventas a Venezuela”, fue lo que escribió Manzanares, tras narrar al Departamento de Estado su encuentro con Pardo en abril de 2005.

Luego de firmarse el acuerdo entre Madrid y Caracas, que también incluía la venta de 12 aviones, el Gobierno estadounidense inició una feroz campaña para impedir la consolidación del convenio porque consideraba que la negociación le daba al presidente venezolano, Hugo Chávez Frías, “más fuerza política y militar”.

“Estados Unidos cree que la venta podría aumentar la capacidad de Venezuela de desestabilizar a la región. Además, el compromiso con España podría dar visibilidad política y legitimidad a Chávez”, alegó Manzanares.

Ante este argumento, Pardo pidió confianza a Estados Unidos. “España va a hacer lo correcto”, dijo.

“Pardo dijo que había dado instrucciones al astillero de Navantia de no incluir nada en la configuración de los barcos que estuviese en contra de la exposición del acuerdo entre España y Venezuela”, informó Manzanares.

No obstante, el estadounidense aseguró haber mantenido su posición de «preocupación» por el trato, ante lo cual Pardo alegó que “los barcos no llevan misiles”.

Estados Unidos no sólo quería “asegurarse” de que España no vendiera armas a Venezuela sino que también exigió detalles sobre el tonelaje de los barcos y hasta el valor industrial y militar de la oferta.

Pese a los clamores de Madrid, ese mismo año Estados Unidos logró sabotear el acuerdo entre los gobiernos de España y Venezuela, al negar las licencias para la utilización de tecnología norteamericana en la fabricación de 12 aviones que estaban incluidos en el convenio.

En otro de los cables, que narra el encuentro entre el canciller español para ese entonces, Miguel Ángel Moratinos, y el embajador de Estados Unidos en Madrid, Eduardo Aguirre, el jefe de la diplomacia ibérica calificó las acciones de Washington como una “medida punitiva” en contra del Gobierno de Zapatero.

La respuesta norteamericana al reclamo de España fue que “no era la intención de Estados Unidos hacer pública la negación de las licencias” pero que Washington, tras analizar la solicitud, decidió bloquearla por sus “preocupaciones con respecto a la transferencia tecnológica a Venezuela”.

“No es un golpe contra el Gobierno español”, matizó Aguirre, quien consideró que la actitud hostil era hacia Venezuela y sólo podría revertirse si Venezuela cambiaba «su actual curso”.

Fuente/AVN
Texto/CO
Foto/Archivo