Un 26 de marzo de 1812|Hace 200 años Venezuela vivió uno de los más graves terremotos de su historia

Un día como hoy 26 de marzo pero de 1812, hace ya 200 años, varios estados de Venezuela vivieron un terremoto bastante fuerte que acabó con ciudades como Caracas, Barquisimeto, Mérida, El Tocuyo, San Felipe, entre otras poblaciones que también se vieron afectadas por el sismo.

Se calcula que en Caracas perecieron unas 10.000 personas, cuando la población era de unas 44.000 almas y en La Guaira 3.000.

La magnitud de estos eventos se establece entre 6.5 a 6.7 para la zona andina y de 6.9 a 7.2 para la zona central.

Ese 26 de marzo de 1812 era Jueves Santo y los fieles católicos estaban congregados en las iglesias. En virtud de que el 19 de abril había caído también en Jueves Santo, los realistas aprovecharon esa circunstancia para hacer creer a los venezolanos que se trataba de un castigo del cielo.

Simón Bolívar, El Libertador, pasó el terremoto en su casa llamada del Vínculo de la Concepción, en la esquina de Las Gradillas, y vino a la plaza de San Jacinto, que está situada frente a su casa solariega, cuando supo que un grupo de frailes predicaban a la aterrada multitud congregada en aquel espacio abierto, haciéndole creer que el terremoto era un castigo divino por haberse separado la Provincia de Venezuela de la autoridad del Rey de España.

Bolívar impactado por lo que estaba escuchando, se colocó a un lado de uno de los frailes predicadores, para pronunciar un vehemente discurso, en el que explicó que aquel lamentable fenómeno sísmico era un simple fenómeno natural ajeno a las ideas religiosas y políticas. Y terminó su intervención con estas palabras: “Si la naturaleza se opone a nuestros designios, lucharemos contra ella y haremos que nos obedezca”.

Texto/YVKE
Foto/Archivo

Venezuela es un país que a pesar de todo la naturaleza ha sido noble y condescendiente con sus habitantes, no nos a golpeado tan seguido como a otros países de nuestra región, sin embargo deberíamos reflexionar y decirnos, cual preparados estamos para soportar terremotos de alta escala, si nuestros maestros enseñan en las aulas los primeros pasos a seguir si ocurre un sismo, que campañas se llevan a cabo en las comunidades para que los eventos de la naturaleza no nos tomen por desprevenidos, seria importante hacer saber a la comunidad cuantas vidas se podrían salvar si en un momento de riesgo tomamos buenas decisiones y que las mismas sean respuestas de una planificación y no de una simple improvisación.